El príncipe Harry ya está en Londres para encontrarse con su padre, el Rey Carlos III, tras el anuncio de que padece cáncer. El duque de Sussex embarcó ayer por la noche en el aeropuerto LAX de Los Angeles en un vuelo de British Airways con destino Londres, y ha aterrizado a media mañana de este martes en Heathrow.

Su llegada ha estado blindada y ha sido imposible captar una sola imagen del príncipe Harry. A pesar de su enfrentamiento con el ministerio del Interior de Reino Unido por despojarle de su servicio de escolta, una comitiva de tres coches -dos de ellos de la Policía Metropolitana- ha acompañado al duque de Sussex para velar por su seguridad. Le esperaban en la terminal VIP del aeropuerto, y en cuanto ha bajado del avión, ha subido a un Range Rover negro para poner rumbo a su encuentro con su padre.

El príncipe Harry ha regresado a Reino Unido por primera vez desde el pasado junio, cuando visitó Londres para testificar en su juicio contra algunos medios de comunicación ingleses. De nuevo, lo ha hecho sin la compañía de su esposa, Meghan Markle, que se ha quedado en Montecito, California, para cuidar de sus hijos pequeños, Archie y Lilibet.

Se espera que este viaje pueda servir para que Harry lime asperezas con su familia, especialmente con su padre y su hermano. La relación con el príncipe William se torció a raíz de las indiscreciones del duque de Sussex, que aseguró en su libro "Spare" que el heredero al trono le cogió del cuello durante una discusión o que acudió borracho a su boda con Kate Middleton.

Declaraciones que pusieron en jaque a la Corona y que abrieron un enorme cisma entre Harry y el resto de los Windsor. Diferencias que hasta hace pocos días se antojaban irreconciliables pero que ahora parecen minucias en comparación con el delicado bache de salud que atraviesan los pesos pesados de la monarquía, desde el Rey hasta la princesa de Gales.

 Se desconoce dónde se alojará el príncipe Harry durante su estancia en el Reino Unido. Tras apartarse de la Corona y mudarse a Estados Unidos con Meghan Markle y sus hijos, los duques fueron desalojados de Frogmore Cottage, la única propiedad con la que contaban en Reino Unido y el lugar en el que se sentían realmente a salvo.

El plan inicial era que el príncipe Andrés también fuera desalojado de Royal Lodge, la casa en la que ha vivido desde que se casó con Sarah Ferguson, para ubicarlo en la antigua casa de su sobrino, pero logró llegar a un acuerdo económico con su hermano para detener el proceso.

De este modo, el príncipe Andrés sigue viviendo en Royal Lodge, y aunque Frogmore Cottage ya no es propiedad del príncipe Harry, lo cierto es que la vivienda está vacía y no habría impedimento en que le permitieran hospedarse en la que fue su casa durante lo que dure su estancia en Reino Unido.