Niamey, capital de Níger, se despertó hoy con su presidente secuestrado. Fue a las seis de la mañana cuando, treinta minutos antes de salir el sol, la propia guardia presidencial la que tomó la residencia del jefe de Estado y convocó como rehén al presidente Mohamed Bazoum, pero también a su ministro del Interior. Comienza así el golpe de Estado de Níger de julio de 2023. Comienza así el noveno golpe de Estado africano en los últimos dos años. El último, en Sudán, comenzó una guerra civil en el mes de abril que ya se ha cobrado un número indeterminado de miles de civiles.

Los motivos del golpe en Níger todavía están por aclarar del todo. Los primeros indicios apuntan a que se debería a un motín de la guardia presidencial, un golpe hecho desde dentro a causa del interés de Bazoum por destituir al general a su cargo: Omar Tchiani.

Fuerzas del Ejército nigerino (que rechazó en un inicio unirse a los golpistas) rodearon a las pocas horas la televisión nacional para impedir que nadie se acercara, y no sería hasta las primeras horas de la madrugada del jueves que un grupo de soldados liderados por el coronel Amadou Abdramane anunciaron al mundo que el golpe había triunfado y que el presidente Bazoum había resignado del cargo. De nada ha servido que varios centenares de civiles contrarios al golpe se acercaran a las puertas de la residencia presidencial a media tarde, siendo rápidamente dispersados por los tiros al aire de los rebeldes. Las embajadas recomiendan a sus ciudadanos en Níger que no salgan a la calle.

"Se van a salvaguardar los logros obtenidos con tanto esfuerzo. Todos los nigerinos apegados a la democracia y a la libertad velarán por ello", publicó Bazoum en su primera reacción tras el golpe de Estado.

Bazoum, además, se ha comunicado por teléfono en las últimas horas con el secretario de Estado de EE UU, Antony Blinken, y con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

El presidente de turno de la Unión Africana (UA), Azali Assoumani, condenó este jueves el golpe de Estado en Níger y abogó por la liberación inmediata del gobernante depuesto, Mohamed Bazoum.

"Condenamos rotundamente los sucesos en Níger y exigimos la liberación inmediata del presidente Mohamed Bazoum y su familia", dijo Assoumani, quien es presidente de las Comoras, en San Petersburgo, donde participa en la segunda cumbre Rusia-África.

Níger, exportadora de oro y de uranio

Y los rumores crecen a cada hora que pasa sin que nada se confirme. A la posibilidad de que se trate de un motín por la destitución de Tchiani se le suma la sombra de Francia planeando sobre su antigua colonia que dobla el tamaño de Ucrania, y no son pocos quienes aprovechan a vilipendiar a Francia en las redes sociales. Cabe a destacar que en torno al 30% del uranio que importa Francia para alimentar sus 56 centrales nucleares que alimentan a su vez al 68% del país; mediante una serie de operaciones se saca que el uranio nigerino alumbra a 14 millones de franceses, más que la población de Bélgica. Y critican algunos africanos y nigerinos que Francia les está timando de alguna manera que justifica la precariedad económica que se vive en el país. La cuenta de un conocido troll ruso incluso colgó a las pocas horas del golpe un tweet en su muro en que se preguntaba si habría alguna “coincidencia” entre el golpe y que Josep Borrell, el jefe de la diplomacia europea, visitara dos semanas atrás la capital nigerina.

Esta visita la explicaría realmente la excelente relación que mantienen Bazoum y los representantes de la Unión Europea. Desde que fuera elegido presidente en las elecciones democráticas de 2021, se ha mostrado como un compañero fiable en la lucha contra el terrorismo en la región, permitiendo en su país la bota de militares europeos y estadounidenses como contraoferta de la deriva rusa de las naciones vecinas. Ha vendido ese uranio tan necesario a los galos. No debería haber motivos para que la UE o Francia quieran dañar una nación que les estaba dando tantas alegrías.

Cierto que Francia les compra el 65% del uranio, pero resulta llamativo que nadie mencione entre las cuentas afines a Rusia que Canadá y Corea del Sur le compran el 35% restante, ni que los golpes de Estado pocas veces se han mostrado como la mejor alternativa viable. Además, pese a ser el cuarto productor mundial de uranio, Níger dedica un 70% de sus exportaciones a 2.700 millones de dólares en oro con destino a Emiratos Árabes Unidos.

La siempre presente duda rusa

A sabiendas de que el golpe de Mali (agosto de 2021) y el golpe de Burkina Faso (octubre de 2022) que pusieron a sendos militares al mando, ambas naciones vecinas a Níger por el este, ambas contaminadas igual que Níger de la amenaza del yihadismo saheliano, tomaron carices que se dirían en favor de Rusia, este caso de rehenes de Niamey da para imaginar. ¿Estará detrás la mano rusa? Pero esa respuesta no la tenemos. Se adivina, se huele, pero todavía no se puede afirmar. Ya se habló sobre la actividad de grupos financiados por Moscú que abogaban por un partenariado con los rusos en la lucha yihadista, precedentes en Mali y Burkina. A falta de pruebas, precedentes, y esperar.

Son dardos que se arrojan unos a otros en el tablero de juego. Francia, Nigeria (preocupada por su lucha en la frontera con Boko Haram), la Unión Africana, Naciones Unidas y la UE ya han condenado este brote de inestabilidad política en Níger, en lo que la UA llamó en un comunicado a la comunidad internacional para “unir las voces en una condena unánime de este intento de golpe, y por la inmediata e incondicional retirada de los amotinados a sus barracones”. De Rusia sólo se escuchan sus trolls, porque por no tener no tiene ni embajada en Níger.