Cargando...

Polémica

Caos e indignación en Georgia por la presencia de la hija de Lavrov en una boda

Las autoridades detienen a 16 opositores georgianos que protestaban frente al résort donde se celebraba la boda de un familiar del ministro de Exteriores ruso

Protestas contra el restablecimiento de los vuelos entre Rusia y Georgia, este viernes ZURAB KURTSIKIDZEEFE

La Policía georgiana detuvo hoy a 16 opositores que portestaban contra la boda de un presunto familiar del ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, en la cuidad oriental de Kvareli, a 150 kilómetros de Tiflis.

"Fueron detenidas administrativamente 16 personas", informó el Ministerio de Interior en un comunicado.

La oposición se manifestó en Kvareli para intentar frustrar la boda en la que presuntamente participaba la hija del jefe de la diplomacia rusa, Yekaterina Vinokurova, junto a su marido.

El diputado opositor por el Movimiento Nacional Unido, Levan Bezhashvili, afirmó a la prensa local que "la protesta continuará pese a las detenciones, para mostrar que la población de este país tiene dignidad y no permitirá su rusificación".

Según los manifestantes, los familiares de Lavrov llegaron la Víspera en el primer vuelo de una compañía aérea rusa en cuatro años, después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, levantara la prohibición a los vuelos entre Rusia y Georgia.

Los medios y las redes sociales georgianas informaron que en Kvareli debía de celebrarse la boda del rapero Moshe Vinokurov (Mika Vino), ciudadano israelí que podía ser hermano del yerno de Lavrov, Alexandr Vinokurov.

En tanto, los hoteles Kvareli Lake Resort y Akhasheni Wine Resort & Spa, frente a los cuales tiene lugar la protesta, califcaro de "desinformación" que la hija de Lavrov esté hospedada en sus instalaciones.

"Esa información no se corresponde con la realidad. Se trata de una desinformación, una mentira y una provocación deliberada. No tenemos huéspedes con este apellido", señalaron los hoteles en una nota.

Por su parte, el líder del partido gobernante Sueño Georgiano, Irakli Kobajize, calificó los sucesos de "campaña xenófoba".

"La xenofobia no puede tener lugar en Georgia, la oposición exhibe un fascismo liberal al desatar una campaña xenófoba", añadió.

La víspera varias decenas de georgianos protestaron contra la reanudación de los vuelos entre Rusia y Georgia, que la presidenta georgiana, Zalomé Zurabishvili, calificó de "indeseables".