Brasil

Bolsonaro: “Es una falacia decir que el Amazonas es el pulmón del mundo”

El presidente de Brasil arremete en la Asamblea General de la ONU contra el socialismo de Venezuela y Cuba

Jair Bolsonaro en la ONU/EFE
Jair Bolsonaro en la ONU/EFElarazon

El presidente de Brasil arremete en la Asamblea General de la ONU contra el socialismo de Venezuela y Cuba

Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, arremetió desde la sede de la Asamblea General de la ONU contra el socialismo y criticó duramente a Cuba y Venezuela. Bolsonaro abrió los debates de la sesión anual dando el primer discurso por una tradición de la ONU que le confiere ese privilegio simbólico a Brasil.

El mandatario dio “las gracias a dios por estar vivo” después del ataque con puñal que sufrió en la campaña electoral y que le ha hecho pasar varias veces por quirófano. Ante un auditorio expectante, el brasileño dijo que su país “se ha zafado del riesgo del socialismo” y que está “reconstruyendo” la nación “basándose en los ideales de su pueblo”.

“Queremos reducir el desempleo, la violencia y el riesgo para las actividades empresariales, reduciendo la burocracia, desregulando y, sobre todo, dando ejemplo. Mi país estuvo a punto de caer en el socialismo, lo que nos llevó a la corrupción a la recesión grave y a unos índices de delincuencia elevados”. A este respecto, dijo que durante los seis primeros meses de gestión como presidente, Brasil ha visto reducido el número de asesinatos un 20%.

El líder de ultraderecha afirmó que el Partido de los Trabajadores de Lula da Silva y Dilma Rousseff provocó "ataques ininterrumpidos a los valores religiosos"respaldados por el Foro de Sao Paulo, organización que reúne a partidos de la izquierda de América Latina.

Sobre Venezuela también fue muy crítico: “Venezuela era un país democrático, pero ahora padece la crueldad del socialismo, todo el mundo es pobre, no tienen libertad. Brasil también ha sufrido el impacto de la dictadura venezolana”. Asimismo fustigó al régimen cubano, al que reprochó haber enviado a Brasil a 90.000 médicos que “trabajaron en condiciones de esclavitud”.

Una de las partes más esperadas de su discurso fue la referida al Amazonas después de los devastadores incendios que consumieron miles de hectáreas de la selva. A este respecto, Bolsonaro manifestó que “es una falacia decir que el Amazonas es un patrimonio de la humanidad y un pulmón del mundo. Es una mentira, una falta de respeto que refleja un espíritu colonialista", y defendió que “el fuego no está devastando el Amazonas como dicen los medios”.

El líder criticó a Macron por haber sugerido que se impusieran sanciones a Brasil. A quién sí alabó fue a Donald Trump porque él ha sabido “defender el respeto por la libertad y la soberanía de cada país”.

El mandatario defendió que cualquier intento de ayudar al Amazonas tiene que estar basado en “el pleno respeto a la soberanía de Brasil”. Y añadió: “Rechazamos cualquier intento de instrumentalizar la agenda medioambiental para favorecer los intereses políticos y económicos extranjeros, sobre todo de aquellos que vienen disfrazados de buenas intenciones”.

Somos uno de los países que más protege su medioambiente”, defendió el jefe de Estado brasileño. “Ahora, el tiempo seco y el viento pueden dar lugar a incendios forestales, también hay otros que forman parte de las prácticas de la poblaciones locales e indígenas. Todos los países tienen problemas”.

“Pero el mundo tiene que comer”, proclamó Bolsonaro. “Francia y Alemania dedican el 50% de su territorio a la agricultura. Brasil solo dedica el 8% de su suelo a este fin. El 61% de nuestro territorio está protegido. Seguimos una política de tolerancia cero con la delincuencia y ahí están incluidos los delitos medioambientales”.