El filtrador de documentos del Pentágono se despidió del chat antes de ser detenido: "Chicos, esto ha sido bueno, os quiero a todos"

Cientos de documentos altamente clasificados que contenían los secretos mejor guardados de la seguridad nacional de Estados Unidos han visto la luz, viéndose comprometidos y sacando los colores al Pentágono, a raíz de las filtraciones ilegales de un joven de 21 años miembro de la Guardia Nacional de las Fuerzas Aéreas de Massachusetts.

Las autoridades federales (FBI) arrestaban a Jack Douglas Teixeira este jueves en el domicilio de su madre, situado en el barrio de North Dighton, después de que media docena de agentes del FBI fuertemente armados entraran a la fuerza en la vivienda familiar, con el apoyo de un avión bimotor de vigilancia policial del Gobierno, poniendo al sospechoso a disposición judicial para ser procesado en el Tribunal Federal del Distrito de Massachusetts y a la espera de una audiencia el próximo miércoles.

El fiscal general Merrick Garland anunció desde Washington el arresto en relación con la “remoción, retención y transmisión no autorizada de información clasificada de defensa nacional”, en referencia a la Ley de Espionaje, utilizada para enjuiciar el robo y mal uso de inteligencia confidencial estadounidense.

Jack Teixeira, está acusado de violar dos leyes que protegen los secretos del Gobierno de Estados Unidos, se enfrenta ahora a cargos de filtración de decenas de documentos clasificados en un servidor de chat de juegos de la aplicación Discord, con penas de hasta 20 años de cárcel.

Los compañeros del chat donde filtró la información secreta también están siendo interrogados y aseguran que lo hizo para impresionarles con la intención de mostrar qué es realmente la guerra. Su intención, según otros jóvenes del grupo, fue más la de informar e impresionar que la de revelar información de alto secreto para poner en riesgo la seguridad nacional del país. En contra de los rumores de las últimas horas, creen que el “Aviador Teixeira” no pretendía dañar la seguridad ni filtrar dicha información a Rusia u otros enemigos de Estados Unidos.

Conocido en la plataforma digital como “OG” (Original Gangster), Teixeira era su líder no oficial y al parecer pretendía enseñar a los más jóvenes detalles reales de la guerra, afirman algunos de sus miembros.

Descendiente de oficiales del Ejército, se perdió su graduación de la Escuela Secundaria por atender las obligaciones del entrenamiento en la Base de la Fuerza Aérea Lackland en Texas, donde culminó el servicio militar para entrar oficialmente en el servicio activo del Ala de Inteligencia 102 de la Guardia Nacional Aérea de Massachusetts, en octubre de 2021. Allí alcanzó el rango de Aerotécnico de Primera Clase y fue condecorado con una Medalla de Logro de las Fuerza Aéreas, otorgada a jóvenes aviadores por sus notables logros.

“Todos respetaban a OG. Era el hombre, el mito, la leyenda”, destaca Vahki, como se hace llamar en la plataforma uno de los miembros del grupo. En entrevistas, otros integrantes del chat Thug Shaker Central, explicaron que el grupo empezó como un lugar de encuentro entre jóvenes y adolescentes durante el aislamiento de la pandemia para compartir su amor por las armas y por Dios, memes - a menudo racistas - y jugar a la guerra en videojuegos temáticos.

Desde el pasado mes de octubre, el filtrador estaba adscrito a la unidad de inteligencia de la Guardia Nacional Aérea, posición que utilizó para compartir descripciones de información clasificada de Estados Unidos, tal y como han dado a conocer ahora altos funcionarios a través de los propios miembros del grupo. Teixeira acabó subiendo a la red cientos de papeles secretos, incluyendo mapas detallados del campo de batalla de Ucrania y numerosas evaluaciones del material armamentístico y otros datos confidenciales sobre la maquinaria bélica rusa.

“Chicos, esto ha sido bueno, os quiero a todos”, escribió por última vez Teixeira, líder del grupo del chat en línea, a modo de despedida.

“Nunca quise que esto se pusiera así. Recé a Dios para que esto nunca sucediera. Y recé y recé y recé. Sólo Dios puede decidir lo que sucede a partir de ahora”.

El debate no se ha hecho esperar, y ahora la cuestión más destacada a todos los niveles - político, mediático y social - es averiguar cómo ha podido tener alguien con el perfil de Jack Teixeira acceso directo a documentación clasificada tan altamente sensible.

La fuga de documentos militares secretos tiene consecuencias difíciles de prever, a pesar de los esfuerzos de la Administración Biden por quitarle importancia al asunto.

Desde Irlanda, donde Joe Biden estaba de viaje oficial esta semana, el presidente de Estados Unidos aseguró que las autoridades “se están acercando” a encontrar respuestas sobre la filtración de documentos clasificados del Pentágono, resaltando “no estar preocupado” por las revelaciones sobre la guerra y otros temas sensibles de la inteligencia estadounidense.

Pero aún quedan muchas preguntas en el aire, después de que el joven de 21 años miembro de la Guardia Nacional de la Fuerza Aérea de Estados Unidos demostrara tener acceso y, como consecuencia, filtrara documentos clasificados del más alto nivel de seguridad del país. Mucho más allá de sacarle los colores al Pentágono, las acciones del filtrador de Massachusetts suponen un punto de inflexión para la seguridad de la inteligencia estadounidense y los secretos mejor guardados del país, al haber dejado en evidencia las fallas del sistema de defensa del país, supuestamente el mejor protegido del mundo.

Funcionarios de la Administración muestran su malestar y preocupación por que esta violación contra los existentes protocolos de seguridad pueda dañar las múltiples operaciones que Estados Unidos tiene en marcha, algunas de ellas desde hace décadas, en países de toda la geografía mundial.