Rusia responde a Occidente con la prueba de un misil hipersónico en el Atlántico

Un buque de guerra ruso ha llevado a cabo en las últimas horas una prueba de un misil hipersónico capaz de volar a más de 11.000 kilómetros por hora, según afirmó el Ministerio de Defensa de Rusia. Se trata de la fragata Almirante Gorshkov, que realizó una simulación por ordenador de sus misiles hipersónicos Zircon para probarlos en el Océano Atlántico occidental, con el objetivo de obtener más datos sobre su capacidad para alcanzar objetivos a más de 1.000 kilómetros de distancia.

Este buque de guerra ha sido equipado con misiles Zircon y ha sido desplegado por primera vez para un “largo viaje” que le llevará a recorrer aguas del Atlántico, Índico y Mediterráneo. Los Zircon son unos nuevos misiles hipersónicos desarrollados desde 2018 por parte de Rusia. Para Putin, estos proyectiles “permitirán proteger adecuadamente a Rusia de amenazas externas” en plena guerra de Ucrania.

El comandante de la fragata, Igor Krojmal, dijo hace dos semanas, cuando partió de Severomorsk, que la embarcación ha sido sometida a un proceso completo de entrenamiento antes de comenzar la travesía. “El barco lleva munición para los misiles Zircon y Kalibr, material de defensa aérea, torpedos y artillería. La tripulación está preparada para llevar a cabo acciones de combate”, aseveró Krojmal durante la ceremonia, según informaciones recogidas por la agencia de noticias Interfax.

La prueba se produce cuando Occidente está a punto de enviar decenas de carros de combate a Ucrania -algunas fuentes dicen que podrían llegar hasta 200 tanques-, una medida que podría ayudar a Kyiv a cambiar el rumbo del conflicto. Alemania, de momento, ha anunciado este miércoles que transferirá 14 tanques Leopard 2A6 después de someterse a semanas de presión internacional.

Después de zarpar desde Rusia hace dos semanas, el buque Gorshkov hizo un lanzamiento de prueba de los misiles Zircon de última generación con capacidad nuclear en el Mar de Barents, alcanzando un objetivo a casi 1.000 kilómetros de distancia en el Mar Blanco, afirmó el Kremlin.

La fragata rusa fue seguida y vigilada hace unos días de cerca por dos buques de la Armada española cuando se dirigía hacia el sur por el Canal de la Mancha. En concreto, el patrullero de altura “Serviola” y la fragata “Méndez Núñez” monitorizaron al Admiral Gorshkov en una misión que se prolongó durante dos días y que se enmarca en las Operaciones Permanentes de vigilancia y disuasión de las Fuerzas Armadas en territorio nacional.

LaMarina Real británica también rastreó los movimientos de la fragata rusa mientras navegaba hacia Reino Unido. Las labores de seguimientos recayeron en el buque HMS Portland.