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Venezuela

“Maduro está moviendo una jugada con Cuba, el Vaticano y España”

El analista Antonio de la Cruz considera que una victoria de Biden beneficia al presidente venezolano por la posibilidad de que rebaje las sanciones

El diputado Gilber Caro ofrece declaraciones tras ser liberado en Venezuela RAYNER PENA REFE

Antonio de la Cruz, director ejecutivo del think tank Inter American Trends y columnista del diario “El Nacional”, considera que habrá un proceso de diálogo en el que interviene El Vaticano, el Gobierno español y el cubano, que le permitirá al régimen de Nicolás Maduro ganar cuatro años hasta las próximas elecciones presidenciales de 2024.

¿Cuál es la estrategia del Gobierno de Maduro tras la liberación de presos políticos?

La excarcelación de presos en Venezuela obedece a una estrategia para lograr legitimar a Nicolás Maduro haciendo que en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre participe un gran sector de la oposición. El régimen de Maduro se encuentra en el punto más débil dentro de los siete años que lleva en el poder.

¿Cómo ha llegado a esta situación?

La presión máxima que ha usado EE UU, que le ha dejado sin ingresos de divisas para mantener el Estado represor, y ha tenido que recurrir a ingresos de actividades ilícitas como el contrabando de oro, de combustible y el narcotráfico. Al pertenecer ese dinero a las mafias, no todo está disponible para sostener el Estado. El régimen carece de ingresos por explotación petrolera y se enfrenta a la gran amenaza de que Alex Saab (supuesto testaferro de Maduro detenido en Cabo Verde) va a contribuir a develar toda la red de lavado de dinero que maneja el régimen. Ello pone a Maduro en una condición muy débil. La perspectiva es que tenga que abandonar el poder para darle campo a otro, ya sea de dentro o de fuera del chavismo.

¿Tiene Cuba algún papel en la crisis venezolana?

La salida de Maduro de la presidencia llevaría a que Cuba perdiera el apoyo que ha tenido de Venezuela en términos de recursos financieros. Para Cuba sería algo crítico porque entraría en una crisis peor que el “periodo especial” tras la caída de la URSS.

¿Y el Vaticano?

Para salir de esta situación se alinearon factores como el Vaticano, que en el pasado tuvo un papel importante en el deshielo entre los EE UU de Obama y Cuba. El Vaticano ha manejado los elementos para poder generar la solución de esta posible transición en Venezuela. Lo primero que hubo fue un comunicado de la Conferencia Episcopal el 11 de agosto que cambió el centro de gravedad de la discusión en Venezuela. Hasta entonces los principales actores sostenían que las elecciones eran ilegítimas, pero el comunicado pone la discusión dentro de la oposición para tratar de saber si existe un plan después de las elecciones del 6 de diciembre. Se usa la figura del opositor Henrique Capriles, porque tiene un capital político dentro del G4 (los principales partidos opositores). Capriles plantea una alternativa distinta al decir que tras el 6 de diciembre no hay un mañana. Capriles usa los mismos argumentos que usó Henry Falcón en las elecciones presidenciales de 2018. Eso generó la deslegitimación de la presidencia de Maduro en 2009.

¿Cómo se llega a la liberación de los presos políticos?

El 12 de agosto el Papa se reunió con Michelle Bachelet y en esa conversación se plantea cuáles son los elementos mínimos para que la Comisionada deje de ejercer tanta presión con el régimen de Maduro, muy crítica en sus informes contra el Gobierno de Maduro. Ella planteó la necesidad de liberar a los presos que finalmente se han liberado estos días.

¿Habrá entonces un intento de negociar con una parte de la oposición?

Lo que viene es un proceso de negociación en el que Maduro está moviendo una jugada con Cuba, el Vaticano y España. Borrell ha dicho que en Venezuela no hay condiciones pero que deberíamos trabajar en un diálogo. Pero en Venezuela ya sabemos que el diálogo es ganar tiempo para el régimen.

¿Será clave lo que pase en Estados Unidos en las elecciones del 3 de noviembre?

Todo se está posponiendo para ver qué pasa en Estados Unidos. Con una administración Biden habría resultados para la estrategia de Maduro. Lo que necesita Maduro para sobrevivir es que se levanten algunas sanciones. Todo esto fue aprobado y decidido desde Cuba. Es la jugada cubana que permite al régimen ganar cuatro años en los que van a pasar muchas cosas.

¿Por qué Capriles quiere ir a unas elecciones que sabe que ganará?

Henrique Capriles fue candidato presidencial en 2013, y cuando perdió ante Maduro dijo que le habían robado las elecciones y que podía probarlo con las actas. Sin embargo, finalmente no pidió la revisión de las actas al Consejo Electoral y perdió liderazgo. En 2016 pidió un referéndum revocatorio contra Maduro y cuando estaba a punto de conseguirlo recibió una llamada del Papa Francisco para pedirle que suspendiera una marcha a favor del referéndum y que que a cambio se comprometía a facilitar un proceso de diálogo con las consecuencias que conocemos. Capriles desapareció de la escena política. Ahora está reconstituyendo su capital político. En Venezuela hay tres referencias en la oposición. Una es Capriles, otra es María Corina Machado y la tercera es Juan Guaidó. Guaidó podría salir mal parado de esa lucha interna. Así que Capriles cree que podría salir como referente antichavista de una oposición que quedaría debilitada pero con vida porque vienen elecciones regionales el próximo año.