País Vasco

Arantza Quiroga el símbolo del cambio

Rajoy elogia el trabajo del PP vasco porque ha defendido «valores y no puestos». Mañana visitará Vitoria.

Arantza Quiroga, el símbolo del cambio
Arantza Quiroga, el símbolo del cambiolarazon

MADRID- Mariano Rajoy, como también el presidente del Gobierno, se han mantenido hasta ahora apartados de los focos que miraban hacia la negociación entre socialistas y populares en el País Vasco. Por un lado ha ido la «cocina» de este pacto de Estado y por otro ha seguido en pleno furor la refriega política a nivel nacional. Con el trabajo ya hecho y, además, bien hecho, el líder del PP visitará mañana el País Vasco para agitar la bandera del cambio y hacerse la foto con la futura nueva presidenta del Parlamento regional, Arantza Quiroga. Sin duda, esta joven hará historia el viernes cuando supere la votación que se celebrará en la Cámara vasca. Ya es uno de los símbolos más representativos de ese «cambio» que socialistas y populares vascos han convertido en su mantra desde las elecciones.Quiroga era a finales de los 90 una de las jóvenes promesas de la escuela de Aznar como presidenta de las Nuevas Generaciones de Guipúzcoa. Ha estado siempre próxima a la dirección del partido, estuviese al frente de ella quien estuviese. Disciplinada, trabajadora, ahora es del equipo de confianza de Antonio Basagoiti. Entre los suyos no se le coloca ninguna etiqueta, aunque en ese sector que todavía se siente próximo a María San Gil se le reprochan algunos gestos «a posteriori» para marcar distancias con la ya ex presidenta regional. En una primera reacción Basagoiti llegó a tantear, quizás pensando en sellar definitivamente la unidad interna, a Carmelo Barrio, de la escuela de San Gil, para ocupar el puesto que, finalmente, ha decidido dejar en manos de esta joven nacida en Irún y que representa el relevo generacional. Quiroga está casada, tiene cuatro hijos y hace causa con sus profundas convicciones religiosas. A sus espaldas carga con casi 15 años de carrera política que comenzó como concejal en el Ayuntamiento de Irún. Ayer inició el camino hacia sus nuevas responsabilidades con una oferta de integración. «Espero que todos los vascos se sientan representados en el Parlamento», dijo. También adelantó que va a hacer un «esfuerzo por mejorar su capacidad de comunicarse en euskera» por respeto a los parlamentarios que «quieran dirigirse, en libertad, utilizando esta lengua». Rajoy destacó que su nombramiento confirma que el «pacto PSE-PP va en serio».

A nivel nacional, sigue KosovoEl acuerdo en el País Vasco no resta fuerza a las profundas diferencias que separan a nivel nacional a PSOE y PP. La crisis es la principal, pero siguen ardiendo otros fuegos como el de Kosovo. La portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, anunció ayer que su grupo va a solicitar que la Junta de Portavoces vuelva a reunirse antes de Semana Santa para intentar que Rodríguez Zapatero sea convocado en la tercera semana de abril, cuando tampoco hay sesión plenaria prevista, para informar de la retirada de las tropas.