Un Tour para olvidar a Armstrong

La presentación del Tour 2013 tuvo como protagonistas, además del recorrido, a Lance Armstrong y el dopaje. «Esta organización es el futuro, los directores de los equipos tienen que ser un cortafuegos contra el dopaje, son ellos los que tienen la clave en la lucha contra el dopaje», indicó el director de la competición gala, Christian Prudhomme.

El acto reunió a la mayoría de los aspirantes a hacerse con la centenaria edición de un Tour que se desarrollará totalmente por Francia. La carrera celebra el año que viene su centenario y arrancará el 29 de junio en Córcega, último territorio francés que faltaba por conquistar al Tour. Alberto Contador, Bradley Wiggins (actual campeón) o Andy Schleck fueron algunos de los presentes y pudieron saber de primera mano qué les depara la próxima edición. Con seis etapas de montaña, cinco llegadas en alto y el ascenso a 28 puertos, el Tour quiere dejar atrás la anodina edición del año pasado. Se ha situado la última crono a cuatro días del final para dejar que la montaña sea el auténtico juez de la carrera. «Es muy compensado y, aunque pueda predominar la montaña, los escaladores lo tendrán difícil para marcar diferencias», afirmó Contador. En relación a Armstrong, con el que compartió equipo en 2009, el pinteño le mostró su apoyo: «Se le ha faltado el respeto a Lance. Desde mi punto de vista, ha sido humillado y linchado, le han destruido». Sin embargo, no todos los compañeros de profesión apoyan al estadounidense. «Lance Armstrong es como Papá Noel, al envejecer comprendes que no existe», señaló Wiggins.

Por otra parte, ayer hubo un nuevo episodio del «caso Armstrong». El médico español Luis García del Moral, suspendido a perpetuidad por la Agencia Estadounidense Antidopaje (USADA), rechazó «cualquier implicación». «Me dijeron (USADA) que si declaraba en contra del señor Armstrong yo quedaría fuera de las acusaciones»... Pues el chivatazo le ha salido caro.