MADRID- Fueron 24 horas de infarto. Durante toda la noche un goteo de resultados informaba a la comunidad universitaria del futuro de la Complutense. Cientos de estudiantes estuvieron enganchados a los resultados del escrutinio de la primera vuelta en las redes sociales. Aunque José Iturmendi fue siempre en tercera posición, todos creían en la remontada. Y no se equivocaron. En torno a la 1:30 horas se desvelaron los candidatos que pasaban a las segundas votaciones. El catedrático pasó la primera vuelta como líder de los comicios con un 25,99 por ciento y se enfrentará en la segunda vuelta a José Carrillo. Pero todo parecía finalizado cuando ayer la incertidumbre volvió a reinar en las elecciones. Cuando todo el mundo esperaba una nueva polémica por parte de la Junta Electoral de la Complutense (JEC), ésta sorprendió a los presentes anulando la urna que quedó impugnada por mezclar dos colectivos con distinta ponderación. A petición de Carlos Andradas, el tercer candidato en la primera vuelta, la junta electoral estudió la posibilidad de repetir la votación en la Facultad de Geografía e Historia, donde surgió el problema. Los alumnos montaron en cólera ante el «pucherazo» y convocaron una manifestación en la puerta del edificio del Rectorado. A pesar de sus diferencias ideológicas, allí estaban juntos para luchar por lo que consideran que es justo. Los partidarios de Iturmendi y Carrillo se reunieron para apoyar a sus candidatos y protestar por la decisión que podía tomar en breves instantes el órgano electoral.

A las 17:00 la junta electoral comunicaba la resolución de las elecciones. «La impugnación de los comicios favorece a Andradas», confirmaban algunos de los presentes, «pero no os preocupéis, que pasamos». Sin embargo, finalmente la JEC atendió al sentido común y cedió en su intento de anular el proceso. Ambos grupos se fundieron en un abrazo y se felicitaron por la buena noticia. Al finalizar la reunión, deportivamente todos se desearon suerte para la segunda vuelta que se celebrará el próximo 13 de abril. Además, los representantes de ambos candidatos han conseguido que la junta electoral les dé la razón e instale en las segundas votaciones mesas electorales donde José Iturmendi ya denunció que no existían. Los centros adscritos y hospitales universitarios podrán ejercer su derecho a voto sin necesidad de perder horas de trabajo a causa del largo desplazamiento que tienen que soportar. Durante el periodo de campaña, los candidatos eximieron esta petición a la junta, pero al día siguiente y sin motivo alguno, se rechazó la propuesta. Ahora que Andradas no está en el bombo de las elecciones, la junta instalará las mesas electorales. Una vez más, la incoherencia del Rectorado se ve patente en las decisiones tomadas por la JEC y demuestra que a su candidato no le interesaba los votos de estos dos colectivos perjudicados.

El cambio para la universidad.
El catedrático José Iturmendi ha sido siempre muy crítico con la gestión de Carlos Berzosa y su prioridad es refinanciar la deuda y recuperar las relaciones con la Comunidad de Madrid
Más cercano a Carlos Berzosa.
José Carrillo fue en primera posición durante todo el recuento, pero en el último momento perdió votos. Siempre se ha mostrado cercano al candidato Andradas, la mano derecha de Berzosa