Pintadas a favor de ETA y carteles con presos de la banda en las fiestas de Bilbao

Por ello, el PP en el Ayuntamiento de la capital bilbaína ha pedido que se prohíba la manifestación prevista para el viernes –bajo el lema «Por los derechos de Euskal Herria»– porque «pretende ser el colofón al programa de coacción de los radicales».
El Casco Viejo de Bilbao, que celebra desde el sábado la Semana Grande, se viste estos días con numerosos carteles con presos de ETA. En el recorrido que va desde la Plaza Unamuno a la calle Somera aparecieron carteles alusivos a los presos de ETA colocados en las paredes y también colgados de las luces que se han instalado con motivo de las fiestas. En los carteles, realizados con cartón, se puede ver la foto de un preso de ETA, la cárcel en la que se encuentra, la distancia en kilómetros a Euskadi y el mensaje de «etxera» (a casa) acompañado de un símbolo de la "Aste Nagusia"».
La Ertzaintza confirmó haber tenido conocimiento de ello y el servicio de limpieza se encargó de su retirada, aunque volvieron a verse ayer. Además, en el Arenal bilbaíno se apreciaban este domingo pintadas a favor de la banda armada, que fueron borradas por el servicio de limpieza del Ayuntamiento. Según testigos presenciales, en un muro junto al kiosco del Arenal aparecieron pintadas en las que se podía leer «ETA» o «Gora ETA» (Viva ETA).
En este sentido, la portavoz de Bilbao del PP, Cristina Ruiz, pidió ayer al alcalde de la capital vizcaína, Iñaki Azkuna, «que ponga todos los medios de que dispone el Ayuntamiento para impedir la presión y el intento de ETA-Batasuna de condicionar el desarrollo normal de la "Aste Nagusia"».
La portavoz del PP en el Ayuntamiento bilbaíno consideró que «los incidentes provocados por los radicales y la colocación de parafernalia de la banda terrorista responde a una estrategia planificada que demuestra la nulidad absoluta del discurso de Batasuna».
Además, remarcó que «el mundo radical pretende, como todos los años, condicionar las fiestas e imponerse por la fuerza a la voluntad de la mayoría aplastante de bilbaínos cuyo único deseo es divertirse en paz y sin la presión que ejercen los violentos».