Barcelona
El último tren de Krystian Lupa
El dramaturgo estrena en España su nuevo espectáculo, «Waiting Room. 0»
Barcelona- El director teatral polaco Krystian Lupa es uno de los grandes nombres de las artes escénicas europeas. Hoy sube al escenario del Festival Temporada Alta de Girona su última y esperada propuesta, «Waiting Room. 0». Horas antes del estreno, Lupa realizó un curso para actores en el Teatro de los Sentidos de Barcelona donde volvió a demostrar que es un referente para todo tipo de intérpretes.
«Waiting Room. 0» traslada al espectador hasta una estación de tren, punto de encuentro de todo tipo de pasajeros. Allí un grupo de personajes de lo más variado coinciden en una sala de espera. Será en ese entorno donde se creará un microcosmos en el que los actores deben dejar llevarse por su imaginación y por la improvisación, creando un montaje único y experimental.
Creación del microcosmos
Lupa, en declaraciones a LA RAZÓN, explicó ayer que en su nueva producción los personajes «pierden su componente de burgueses para convertirse en gente sin techo, sin sentido en la vida. Todos ellos se encuentran de alguna manera, aunque no sea de una forma oficial, no es querida. Son objetos y sujetos de una agresividad, de contenidos que normalmente están ocultos. Es como una sesión de espiritismo donde cada uno abre su caja de Pandora».
El director teatral incorpora todo tipo de personajes. Entre ellos resulta llamativa la presencia de actores que deciden viajar a Auschwitz para preparar una puesta en escena de «Hamlet». «Hemos aprovechado muchas cosas para "Waiting Room. 0". Una es que uno de los actores de la obra había nacido en Auschwitz. Los actores de "Hamlet"en nuestra obra seguramente tienen un profesor de arte dramático joven, que espera hacer vanguardia. Por eso se van hasta allí como si fuera una iniciación misteriosa».
Uno de los hitos en el trabajo de Krystian Lupa es la forma en que se relaciona con los actores. En este sentido, para él la improvisación es «una manera de interiorizar los personajes. Es mejor dejar al actor libre del texto. No es como la vivencia que pide el método Stanislavski».
El anterior trabajo de Lupa estuvo centrado en la figura de Marilyn Monroe. No oculta su fascinación por la actriz. De aquella producción recuerda que su Marilyn era la intérprete fascinada por ser la Grushenka de los Karamazov: «Fue una Grushenka sin película, sin director, sin público».
El anterior trabajo de Lupa estuvo centrado en la figura de Marilyn Monroe. No oculta su fascinación por la actriz. De aquella producción recuerda que su Marilyn era la intérprete fascinada por ser la Grushenka de los Karamazov: «Fue una Grushenka sin película, sin director, sin público».
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