«Belloch ha asfixiado a los ciudadanos con impuestos»

Si tiene que elegir un rincón predilecto de la ciudad que aspira a gobernar, el candidato popular no lo duda: «La plaza de los Sitios». Ante la pregunta obligada sobre el Real Zaragoza y la delicada situación económica que atraviesa, Suárez no se esconde. «Para salvar al Real Zaragoza primero tiene que dimitir su presidente (Agapito Iglesias) y a partir de ahí hablaremos». Ahora, tiene por delante el reto de devolver al PP la alcaldía de Zaragoza tras ocho años en la oposición. Enfrente tendrá a todo un peso pesado, el ex ministro Juan Alberto Belloch.

–Da la sensación de que tiene mucho que ganar y poco que perder.
–La sensación que tengo es que Zaragoza necesita un cambio de Gobierno.

–¿Cree que el PP ha superado ya en Aragón el lastre electoral de su apuesta por el trasvase del Ebro?
–Esa etapa está más que superada. Quien tendría que dar explicaciones es el PSOE, que ha aprobado dos trasvases en los dos últimos años y ha fracasado en su política del agua.

–¿Cuál será su tarea prioritaria si es elegido alcalde de Zaragoza?
–Resolver la situación económica del Ayuntamiento, que es de quiebra. El reto es garantizar el presente para poder tener un futuro.

–Al frente de uno de los ayuntamientos más endeudados de España no lo tendría nada fácil.
–La tarea, desde luego, no es fácil, pero tampoco imposible. Ya lo hicimos en 1995. Tiene que primar la gestión sobre el derroche, que es lo que ha caracterizado a Belloch.

–¿Qué es lo mejor y lo peor que dejó la Expo 2008 a la ciudad?
 –Lo mejor, las infraestructuras, que llevaban veinte años pendientes. Lo peor, la deuda insoportable y la nefasta gestión, que el Tribunal de Cuentas ha reprochado severamente. De hecho, el agujero de la Expo supone la mitad de la deuda actual del Ayuntamiento, lo que hipoteca totalmente el futuro de la ciudad. Y por si fuera poco, el parque empresarial está vacío.

–¿Cuántos años tardarán los zaragozanos en terminar de pagar la Expo?
– Si siguiera Belloch, no se pagaría en la vida, pero intentaremos que el impacto de la deuda en las inversiones sea mínimo aplicando una política de austeridad severa.

–Con esos antecedentes, ¿la Expo Paisajes de 2014 sería necesaria?
–Evidentemente no, porque el Ayuntamiento no tiene los 100 millones que cuesta. Hace falta revitalizar esos barrios, San José y Las Fuentes, pero no con sueños imposibles.

–¿Necesita Zaragoza un tranvía?
–Posiblemente sea la peor decisión de los últimos 100 años. Todas las ciudades que miran al futuro lo hacen con el metro, pero es un capricho de Belloch que cuesta 480 millones de euros.

–¿Construir una red de metro era una opción posible?
–Técnicamente lo era. Otras ciudades lo han hecho con el apoyo del Gobierno central. Pero ahora, con el tranvía, ya no tiene solución.

–¿Cuál será el proyecto estrella de su Gobierno si sale elegido?
–Una apuesta rotunda por los Juegos de Invierno de 2022.

–Después de tantas negativas cosechadas por Jaca parece cabezonería aragonesa.
–El proyecto es más potente y creíble, al incorporar Zaragoza a la candidatura, siempre y cuando las infraestructuras al Pirineo se terminen. Si no es así no tendremos Juegos de Invierno.

–Con una economía tan mermada, ¿se ve capaz de reducir la presión fiscal para ofrecer servicios públicos de calidad?
– Se pueden ofrecer esos servicios de calidad con una política más eficiente. Una vez analizada en profundidad la situación económica nos comprometemos a no incrementar la presión fiscal, porque Belloch ha asfixiado a los ciudadanos con impuestos.

–¿Zaragoza está preparada para el carril-bici?
–Sí lo está, pero no para un carril-bici que, en muchos casos, supone un auténtico problema. Parece que el diseño se ha trazado sin tener en cuenta los obstáculos.

–¿Tiene alguna intención de mejorarlo?
–Se podría haber hecho mejor. Estudiaremos un carril-bici mucho más racional, que no suponga barreras ni obstáculos.