Castedo niega los regalos de Ortiz

Valencia -La alcaldesa de Alicante y diputada autonómica del PP, Sonia Castedo, comenzó ayer su declaración ante la Sala de lo Civil y lo Penal que la juzga por presuntos delitos de prevaricación, revelación de información privilegiada y tráfico de influencias, en la elaboración del Plan General de Ordenación Urbana de Alicante.

Según el abogado de la acusación popular que ejerce Esquerra Unida, la alcaldesa, durante su declaración de la mañana, reconoció tres conversaciones con Ortiz (dos suyas y una de su marido) que fueron reproducidas a instancias del Ministerio Fiscal que desempeña Felipe Briones. Pero negó haber recibido regalos por parte de Enrique Ortiz.

Sí que admitió haber recibido una cazadora que le regaló la esposa de Ortiz el día de su cumpleaños (23 de diciembre) y que cambió por vales del Corte Inglés, ya que tenía una cazadora similar. Según el letrado de EU, Castedo negó el resto de regalos incluido el viaje a Andorra, que dijo que lo pagó con el dinero de la lotería de las Hogueras de San Juan y una cantidad que sacó de una cuenta de su madre y de su abuela.

El letrado de la acusación popular, José Luis Romero, señaló que Castedo estaba respondiendo a las preguntas del fiscal, «pero otra cosa es la verosimilitud de lo que contesta» y puso como ejemplo una pregunta de Briones sobre cómo reintegró el dinero que cogió de la lotería de las Hogueras «y se ha quedado en blanco».

Sí que admitió que había ido a Ibiza a pasar unos días de descanso en el yate de Enrique Ortiz, pero dijo que eso no era un regalo ya que mantenía una vieja amistad con el constructor.
Finalmente, hacia las ocho de la tarde la verdadera protagonista del día, la propia Castedo, abandonó la sede del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) y, aunque no pudo desvelar el contenido de su declaración, por prohibición expresa del juez, Juan Climent, sí quiso desmentir tajantemente que ella hubiera dicho que había pagado el viaje a Andorra con el dinero de la lotería y de su madre, tal y como había narrado el abogado de EU. «Yo no he dicho eso, sino justo lo contrario».

A su salida, Castedo señaló que, aunque estaba un poco cansada, se sentía satisfecha por poder defenderse ella misma y dar las explicaciones pertinentes «en el lugar en el que las tengo que dar». Además, señaló que el interrogatorio se estaba alargando más de lo previsto -de hecho se retomará el lunes a las diez de la mañana- ya que las conversaciones no se estaban resumiendo, sino que se estaban reproduciendo de manera íntegra. Es más, durante la jornada de ayer solamente preguntó el Fiscal, y llegó «a los hechos de la acusación», dos horas antes de que acabara el interrogatorio.

Con mucha tranquilidad, indicó que ella no tiene por qué justificar su relación con el empresario Enrique Ortiz, y que tampoco hay razón para que dimita como alcaldesa de Alicante y reivindicó su derecho a defenderse.

La declaración de ayer de la primera edil se corresponde con una de las ramificaciones del caso Brugal, en la que se trata de constatar que el constructor Enrique Ortiz contaba con información privilegiada sobre las modificaciones que se incluirían en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Alicante.

El fiscal Anticorrupción de aquella plaza acusó a Castedo de tales delitos tras la grabación de varias conversaciones entre el empresario y la primera edil. De la intervención del teléfono de Ortiz también devino la imputación del ex alcalde, Díaz Alperi. La trama investiga los delitos de extorsión, tráfico de influencias y sobornos.