La mujer asesinada en El Cerezo no había denunciado a su agresor

SEVILLA- Ni denunció ni había acudido a ningún centro para pedir ayuda por el supuesto acoso al que la sometía su ex pareja. Los servicios sociales no tenían por tanto conocimiento del riesgo que corría Ana, la mujer asesinada la noche del pasado lunes en El Cerezo, pese a que los vecinos aseguran que su agresor «la buscaba desde hacía días». La consejera de igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, insistió en este sentido en que «de las siete mujeres asesinadas en Andalucía en lo que va de año –dos de ellas en Sevilla–, sólo una había puesto denuncia y de las 27 muertas en toda España la inmensa mayoría tampoco» la interpuso. «No es imprescindible que la ponga la mujer, cualquier persona que tenga conocimiento de que algo anormal está pasando tiene la obligación de ponerlo en conocimiento de las autoridades», remarcó Navarro, que incluso animó a hacerlo si existen sospechas de maltrato aunque pueda «ser después una falsa alarma. Es preferible que la Policía lo compruebe a que haya que encontrarse con una situación como en este caso irreversible».El crimen ocurrió sobre las 21:15 horas en El Cerezo. La juez de guardia no llegó al lugar hasta las 00:45 horas y se marchaba 40 minutos después, tras autorizar el levantamiento del cadáver y hablar con los familiares de la víctima. La investigación policial continúa abierta para esclarecer los hechos ocurridos en la avenida de San Lázaro, a pocos metros de la vivienda de la fallecida. Fuentes policiales confirmaron ayer que la previsión es que el detenido, de origen ecuatoriano y 38 años de edad, pase hoy a disposición judicial una vez finalizada la declaración de los testigos. El apuñalamiento de Ana J. C. se produjo tras una fuerte discusión con quien había sido su pareja durante unos meses. Quienes lo presenciaron explicaron que su ex pareja la esperaba en la puerta de su domicilio y a pocos metros le asestó varias puñaladas –una de ellas mortal en el cuello, además de en el costado y el tórax–. A las 21:36 el 112 recibió la primera llamada, aunque los testigos aseguran que los servicios sanitarios se demoraron veinte minutos y ya sólo pudieron certificar el fallecimiento, pese a los intentos de tres ciudadanos por interrumpir la hemorragia. A la espera del resultado de la autopsia, todo apunta a que la mujer murió desangrada. Su cuerpo será incinerado hoy a las 12:30 horas en el cementerio de San Fernando.El agresor, que fue detenido en la zona poco después, arrojó las armas –un cuchillo y un destornillador hallados por la Policía– en unos jardines anexos.

Consternación y silenciosEl lugar en el que horas antes había fallecido Ana J. S., segunda víctima mortal de la violencia machista en Sevilla en 2010, amaneció casi sin señales de violencia. Una patrulla de Lipasam se encargaba pasadas las 1:30 horas de borrar los restos del crimen. En el barrio, sin embargo, sólo se hablaba del injusto final de una vecina de toda la vida, aunque natural de Gerena –donde el Ayuntamiento ha convocado a partir de las 20:00 horas de hoy una concentración de repulsa–. También hubo quien prefirió pasar pronto página y se negó a detallar lo ocurrido, pese a producirse a las puertas de su comercio.