López Chaves triunfo y enfermería en Barcelona

Del trío de salmantinos destacó ayer un López Chaves, con casta y ganas de triunfo. Citó de lejos al principio, lo toreó algo despegado y su labor subió enteros con la zurda.
Lo mejor, la soberbia estocada. Con el encastado cuarto, el salmantino planteó una faena con mucha vibración y escaso reposo. Sobresalió la decisión del diestro que, en un descuido, fue volteado aparatosamente. Con la taleguilla ensangrentada y mermado de facultades, pasó «las de Caín» para acabar con el toro.

El segundo llegó muy parado al ultimo tercio. Más que un toro, era un poste de telégrafos. Tan sólo en el haber de Valverde, otra buena estocada. Con el colorado quinto se echó la muleta a la zurda. Aunque el animal no humilló. Estuvo digno y con recursos.

El Capea lanceó con facilidad al tercer morlaco. Empezó con doblones por abajo para atemperar la brusquedad de la res. Siguió despegado y eléctrico, sin ponerle pasión. Abrevió pronto. El que cerró plaza se desplazó con bondad, aunque tardeaba, lo toreó despegado y hacia fuera, sin acabar de coger el sitio. Mucha voluntad y algún detalle, una gran estocada.

Se lidiaron toros de Antonio San Román, bien presentados y manejables. Destacó el 4º. López Chaves, oreja y ovación que recoge la cuadrilla; Javier Valverde, silencio y saludos; El Capea silencio y ovación. Un tercio de entrada. Parte médico: herida por asta de toro, en el glúteo derecho, «sin trayectorias profundas», «varetazo en el muslo izquierdo» y «subluxación en el hombro derecho». Pronóstico «menos grave».

ACTUALIZACIÓN DEL PARTE DE LESIONES Y PRONÓSTICO

El matador salmantino Domingo López Chaves, que sufrió un serio
percance con diversas lesiones en la plaza Monumental de Barcelona la
tarde del pasado 29 de agosto, evoluciona correctamente en cuanto a la
herida de gran dimensión de la nalga derecha, que fue intervenida en
la enfermería y del varetazo del muslo izquierdo. Sin embargo no ha
sido así en el caso del traumatismo del hombro derecho que sufrió una
dislocación parcial ("subluxación") auto reducida por el diestro
inmediatamente después de la cogida. Exploraciones específicas
clínicas y de imagen, repetidas durante las primeras 24 horas de su
ingreso en la Clínica del Remei en colaboración con el traumatólogo
del equipo de la plaza, el Dr. Josep Riba, han evidenciado finalmente
la presencia de una fractura del reborde inferior de la cazoleta
articular de la escápula, que obligará a una más dilatada
inmovilización del hombro y a una intensa rehabilitación posterior.
Con ello el pronóstico "menos grave"emitido en el parte inicial pasa
a ser grave en función de ese recomendable retraso para la reaparición
del torero, la cual estaría marcada por la completa consolidación
clínica y radiológica dentro de plazos conocidos para los huesos, que
se deberían respetar estrictamente para evitar secuelas limitantes
posteriores.