San Fernando de Henares
Una jornada de atascos y esperas
120 kilómetros de retenciones en las carreteras y colas interminables por la huelga de Metro y Renfe
MADRID- Si lo que pretendían los sindicatos con su convocatoria de huelga de ayer en el transporte era acaparar protagonismo mediático en defensa de sus reivindicaciones, está claro que fracasaron. El anuncio del adiós de Esperanza Aguirre eclipsó el resto de la actualidad del día. Si el objetivo era continuar allanando el terreno para el «otoño caliente» que sus líderes auguraron, lo lograron sólo a medias. Los paros en el suburbano y la huelga de Cercanías dejaron el balance habitual de estas jornadas: aglomeraciones en los andenes y atascos en las carreteras. Los servicios mínimos se cumplieron y el gran incidente llegó muy pronto en Atocha, en donde tres integrantes de un piquete fueron detenidos.
En el suburbano, los trabajadores secundaron el paro de cuatro horas por turno –de 06:00 a 10.00 por la mañana y de 17:00 a 21:00 horas los de la tarde– para demandar que no se les aplique el decreto de la reforma laboral aprobada por Moncloa. El gerente del Consorcio de Transportes, José Manuel Pradillo, quiso subrayar al finalizar la jornada que los servicios mínimos se cumplieron estrictamente: «En general, los ciudadanos se han podido desplazar aunque más apretados, con más incomodidades y esperando el doble de intervalo; pero se ha prestado un servicio razonable». Respecto al seguimiento de estos paros entre los propios empleados, ni Metro ni la Comunidad ofrecieron un balance en cifras. De esta forma, el único dato a este respecto es el que brindaron los sindicatos. UGT y CC OO se felicitaron de que 98% de los trabajadores expresara su descontento uniéndose a la medida de protesta.
A pesar de ello, el consejero de Transportes, Pablo Cavero, subrayó el hecho de que el momento en el que finalizaba el paro matinal, un 90% de los usuarios habituales de Metro ya lo había utilizado. Es evidente, sin embargo, que hubo una lógica «desviación», insistió Cavero, de pasajeros hacia el servicios de autobuses y hacia el coche particular. Dos circunstancias que ayudaron a multplicar los efectos de la protesta. En las paradas de la EMT, mucha más gente de la habitual en cualquier otro día aguardaba la llegada de unos autobuses que viajaron llenos hasta la bandera. Otro de los puntos conflictivos se situó en las entradas de muchos colegios, en los que más padres y madres que habitualmente optaron por llevar en coche a sus hijos a la escuela.
Por carretera, los accesos a la ciudad de y las autovías de circunvalación de la región sumaban en plena hora punta de la mañana más de 120 kilómetros de atascos. Lo peor llegó pasadas las 9:00 de la mañana, cuando la M-40 contabilizó 28 kilómetros de retenciones en cinco tramos; en la A-2, con 16 kilómetros, sobre todo a la altura de San Fernando de Henares; y en la A-6, con 15 kilómetros, atascada desde Las Rozas hasta la entrada a Madrid. En la capital, las vías que más congestión sufrieron fueron la Cuesta de San Vicente, la avenida del Arco de la Victoria, el paseo de Delicias hacia Atocha y Santa María de la Cabeza y el norte del paseo de la Castellana.
En lo que se refiere al impacto de la huelga de Cercanías en la región, en protesta por la liberalización del sector aprobada por el Gobierno, transcurrió «sin incidentes» y con el cumplimiento de los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Fomento, del 75 por ciento en hora punta y del 50 por ciento en el resto de horarios. Un portavoz de Adif consultado por Efe aseguró que la circulación de los trenes prevista no se vio afectada en ningún momento por la presencia de algunos piquetes en la estación de Atocha.
Educación, poco seguimiento
La huelga convocada en en todos los niveles educativos por CGT Enseñanza Madrid tuvo escasa acogida entre los profesionales de la enseñanza así como entre los alumnos. Los organizadores del paro aseguraron al finalizar el día que el seguimiento había sido «desigual aunque no inferior al 4 por ciento». La tónica fue de normalidad y no hubo incidentes en ningún centro escolar.
LOS DOS FRENTES DE LA HUELGA
1.- 8 horas de paros en Metro
Sin datos por parte de Metro ni de la Consejería en torno al seguimiento de los paros, los sindicatos cifraron el seguimiento en un 98% entre los conductores y el personal de las estaciones y de casi el 100% entre los operarios de mantenimiento talleres y vías. Las protestas a Metro regresan este viernes.
2.- Huelga en Cercanías
Según Fomento, el seguimiento de la huelga ha sido del 22,68 % y se cumplieron «con toda normalidad» los servicios mínimos decretados, del 73 % en los trenes de alta velocidad y larga distancia, de hasta el 75 % en el servicio de Cercanías Madrid en hora punta y del 65 % en los trenes interurbanos.
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