Abiyán

Gbagbo pide a la ONU que se vaya de Costa de Marfil

Laurent Gbagbo volvió a arremeter contra la ONU y exigió otra vez la salida de los "cascos azules"de Costa de Marfil, mientras se enfrenta a la amenaza de ser alejado de la Presidencia por una fuerza africana.

En la víspera de una visita de alto rango de la CEDEAO y la UA, que podría ser la última antes de una intervención militar para obligarle a dejar la Presidencia, Gbagbo, que insiste en que es el presidente de Costa de Marfil, acusó a los "cascos azules"de la Operación de la ONU de "disparar contra civiles".

Por eso volvió a pedir la salida de la ONUCI y los militares franceses que les apoyan del país, algo que ya reclamó el 18 de diciembre pasado y que no han aceptado ni Naciones Unidas ni Francia, que no reconocen la legitimidad de Gbagbo.

La ONU ha negado haber disparado contra civiles, al tiempo que denunciaba agresiones y acoso contra sus unidades por parte de los partidarios de Gbagbo, acusados de actuar como milicias armadas, junto con mercenarios liberianos, como "escuadrones de la muerte"contra civiles indefensos.

Gbagbo volvió a usar para emitir su mensaje la Radiotelevisión Marfileña (RTI), de titularidad pública, a la que la ONU ha considerado un instrumento de propaganda y le ha acusado de "manipular"la información e "incitar al odio"contra la ONUCI.

El nuevo ataque verbal a la ONU se produce horas después de que el secretario general de la organización, Ban Ki-moon, en una conversación con Ouattara, reconocido internacionalmente como presidente de Costa de Marfil, se mostrase "alarmado por los informes de graves violaciones de los derechos humanos".

En ese sentido, Ban, según un comunicado de la ONU, dijo a Ouattara que "la ONUCI ha recibido instrucciones de hacer todo lo posible para obtener acceso a las zonas afectadas, tanto para la prevención, como para investigar y registrar las violaciones, para que los responsables rindan cuentas"de sus actos.

También reafirmó Ban, en la nota, "su firme posición en defensa de los resultados de las elecciones sobre la base de la voluntad del pueblo de Costa de Marfil", que para la comunidad internacional apoyó mayoritariamente a Ouattara como presidente con su sufragio.

Mientras tanto, hoy viajó a Abuya el primer ministro de Kenia, Raila Odinga, como enviado de la UA para entrevistarse con el presidente nigeriano, Goodluck Jonathan, y unirse mañana al trío de presidentes de la CEDEAO que ira por segunda vez a Abiyán para tratar de convencer a Laurent Gbagbo que ceda pacíficamente el poder a Ouattara.

La UA ha manifestado reiteradamente su total apoyo en el caso de Costa de Marfil a la CEDEAO, que ha advertido que la condición ineludible que han puesto a Gbagbo es que deje el poder o usarán la "fuerza legítima", para lo que ya tienen listos los planes militares. Tras el ultimátum que en nombre de la CEDEAO dieron el pasado martes a Gbagbo para que deje el poder los presidentes Yayi Boni, de Benin; Pedro Pires, de Cabo Verde, y Ernest Bai Koroma, de Sierra Leona, este último ha advertido que la visita del mañana lunes "será la última".

Tanto la Unión Africana como la CEDEAO han reconocido como presidente a Ouattara y suspendido a Costa de Marfil hasta que se haga el efectivo traspaso del poder, mientras la ONU, la Unión Europea, EEUU y otros países también respaldan a Ouattara y han sometido a sanciones a Gbagbo y su entorno.

Hoy, en víspera de la nueva visita a Abiyán de los representantes de máximo nivel de la CEDEAO, Amnistía Internacional (AI) pidió a la organización de los países de África del oeste que "ponga el respeto y la protección de los Derechos Humanos en el centro de sus esfuerzos para poner fin a la crisis".

AI acusa a las fuerzas de seguridad, leales a Gbagbo, de causar el terror entre los ciudadanos y de "disparar, detener y secuestrar a ciudadanos"de forma arbitraria o por ser rivales políticos y pide a la CEDEAO que transmita "un mensaje firme de que se deben respetarlos Derechos Humanos de todos".

También manifiesta AI su "preocupación por los ataques y obstáculos que han enfrentado en los últimos días las fuerzas de paz de ONUCI, mientras trataban de investigar las denuncias de graves violaciones de los Derechos Humanos", por lo que también reclaman que la CEDEAO manifieste su protesta a Gbagbo.