Ya han pasado cinco años desde que se dio a conocer la separación entre Miguel Bosé y Nacho Palau, y aunque el escultor se ha pronunciado en varias ocasiones sobre la ruptura y la relación que mantiene con su ex, que no parecía ser del todo buena, el cantante siempre ha mantenido un silencio sepulcral. Sin embargo, ahora ha aprovechado su visita a ARCO, la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid, para romper su silencio y sincerarse, por fin, sobre el momento que atraviesa su vínculo con el padre de sus hijos.

Al parecer, la enfermedad que padece Palau desde hace cerca de un año les permitido estrechar lazos, hasta el punto de que Bosé está al día en lo que respecta al estado de salud de su ex. “Nacho está estable, está bien. Hablamos mucho. Está bien y esto es lo mejor, y es algo reciente, de la semana pasada”, ha señalado el intérprete “Amante bandido”. De sus palabras se entiende que su relación con el valenciano es de lo más estrecha, y por si no queda suficientemente claro, recalca: “Nunca hemos estado distanciados”.

Eso sí, sobre las declaraciones de Palau en las que se mostró molesto por lo distante que había notado a Bosé tras su ruptura, el cantante le desmiente: “Ha tenido siempre mi apoyo, lo que pasa es que llevarse bien no vende”.

Además, el artista no ha podido disimular su alegría por el nuevo proyecto que comienza en Televisión Española y que le acerca a su tierra natal: “Yo estoy bien. Muy contento de volver a España a trabajar”.

Su actitud con la prensa, muy relajada y cordial, contrasta con la que expresó solo unas horas antes. Bosé advirtió a la prensa que le esperaba a la salida de ARCO de que no respondería ninguna cuestión, y bajó los micrófonos de los reporteros cuando estos insistieron en preguntarle. Parece que el arte le ha hecho reflexionar…