La crónica de Marta Robles: Corrupción, una moción de censura sin apoyos y una tilde recuperada

Lunes

De todas las imágenes y noticias del día, hay una que no se me va de la cabeza durante todo el lunes, y no es la que habla sobre el pasado porno de la expresunta Madeleine McCann, pobre chica. Ni siquiera es la de la mujer muerta a causa de las mordeduras del pitbull que recogió de la calle en Valencia. Es la de ese alumno que golpea hasta dejar inconsciente a una profesora por requisarle su videoconsola. Es verdad que el suceso nos llega desde Florida y casi estamos acostumbrados a acciones aterradoras por parte de los jóvenes allí pero, aquí o allá, los aparatos tecnológicos nos están volviendo dependientes, violentos, deprimidos, alienados… Y no nos damos cuenta.

Martes

Desde ayer, Juliette -qué bonito nombre para una fea borrasca- nos tiene en jaque. Hay más de 39 provincias en alerta, entre ellas las siempre templadas Islas Baleares, que se están poniendo blancas. Mientras tanto, los demás nos ponemos rojos al enterarnos de que, desde el Departamento de Energía de Estados Unidos, se rescata la teoría -que hasta ahora solo avalaba el FBI- de que la pandemia se produjo al escaparse el virus del covid-19 de un laboratorio chino. No hablan de arma biológica, sino de escape accidental, pero mientras Pekín se ofende y habla de difamación, los demás pensamos en qué hacían jugando con una «cosa» tan peligrosa y cómo es posible que se les escapara. Sobre todo, porque aunque queramos olvidarnos de todo esto, como cuenta Miguel Sebastián en su libro «El virus interminable», la covid sigue ahí y sólo en diciembre de 2022 mató a más de 1.000 personas en nuestro país. ¿Qué dicen nuestros políticos? Pues es que ahora andan entretenidos con la moción de censura de VOX. ¿Para qué sirve una moción de censura sin apoyos suficientes para salir adelante? Para hacer ruido mediático y para desestabilizar el sistema.

Miércoles

Lo de Tito Berni lo cuenta perfectamente mi compañero y amigo de «Espejo Público», Gonzalo Bans, en Instagram para «The Objective». ¿Que qué es lo del Tito Berni? Pues un caso de extorsión, contratos públicos, cocaína, prostitutas y viagra conocido como el «caso Mediador» Corrupción en estado puro que salpica a dirigentes del partido socialista. Juan Bernardo Fuentes Curbelo, el Tito Berni, y Marcos Antonio Navarro, el Mediador, ofrecían a empresarios privilegios en contratos con la Administración y les ayudaban a no recibir inspecciones en sus negocios en las Islas Canarias. Si aceptaban, pagaban unos 5.000 euros a través de un club de fútbol de niños donde se lavaba el dinero. El diputado socialista recibía en el Congreso de los Diputados a los empresarios que le enviaba el Mediador y pactaba los asuntos a tratar. Luego, los mandaba a la sede de la Guardia Civil en Madrid para reunirse con Francisco Espinosa Navas, alias Papá -un general de la benemérita ya retirado-, para recibir sobornos. Y tras las reuniones con los empresarios, se iban a comer y a festejar: prostitutas, cocaína, viagra… Cada noche les salía por unos 3.500 euros que pagaban los propios empresarios en plena pandemia. ¿Un nombre más? Taishet Fuentes, sobrino del Tito Berni y ex director general de Ganadería del Gobierno de Canarias, que recibía expedientes con multas a empresas ganaderas y los modificaba a cambio de que esas empresas pagaran al Tito Berni. ¿Cuántos diputados socialistas estaban implicados en estas cenas? Según el Mediador, unos 15 o 16. Y también, según él, el presidente de Canarias lo sabía todo. Ay…

Jueves

Si el otro día salió a la luz la entrevista en la que Bertín Osborne decía que nunca había estado enamorado, y al siguiente sobrevinieron las lágrimas de Fabiola Martínez confesando cuánto le había dolido escuchar que nunca la quiso, hoy es el día para que una servidora se atreva a decir que el amor es diferente para cada cual, que hay quien no reconoce el enamoramiento y que Bertín será como sea, entenderá el enamoramiento como lo entienda, pero ha querido a Fabiola todo lo que se puede querer. Si lo ha hecho bien o mal, solo lo pueden saber ellos. Como también saben, igual que los demás, que querer bien es muy difícil. Pero que Fabiola es extraordinaria y que Bertín la ha querido es innegable. Todos queremos que nos quieran más y mejor y que el amor dure para siempre, pero si hay algún misterio en la vida es el del amor, distinto para cada cual. También para Bertín y para Fabiola.

Viernes

Ay, Señor… ¡que la RAE devuelve la tilde a «sólo» cuando se puede sustituir por solamente! Así me lo enseñaron en mi infancia. ¡Cuánto me costó quitársela! ¡Y cuánto voy a gozar devolviéndosela! Gracias, RAE y Pérez Reverte, que sé que esto es un asunto a medias entre el académico y todos los demás.