Bárbara Rey, sobrepasada, acude al hospital en pleno escándalo por el Rey Juan Carlos I

Bárbara Rey se siente estos días como hace veinte años. Vuelve a ser objetivo de las cámaras y sus relaciones con las altas esferas del Estado la ponen de nuevo en serios apuros. Todos recuerdan sus imágenes asegurando ante millones de espectadores que su vida corría peligro, y aunque ahora la situación es diferente en este sentido, sí que se ha llevado algún que otro susto de salud a consecuencia del estrés por el que pasa desde hace semanas.

“A Bárbara le dio un chungo, un parraque. Sofía (Cristo) creyó que a su madre le estaba dando un infarto y llamó al 112. Cuando ellos vieron que los síntomas no eran compatibles y que no era nada grave, le dieron instrucciones para que Sofía la calmara y al final se tranquilizó”, reveló Lydia Lozano en “Ni que fuéramos Shhh”. Por lo visto, la actriz sufrió un fuerte ataque de ansiedad tras comprobar que las grabaciones de sus comprometidas conversaciones con el Rey Juan Carlos I habían visto la luz.

Bárbara Rey está sobrepasada y no levanta cabeza. De hecho, este mismo jueves 10 de octubre ha sido vista visitando un hospital de Málaga, esquivando las preguntas de los reporteros y mostrando una actitud desafiante ante la prensa. “Estoy fenomenal”, ha dicho al abandonar la clínica, un adjetivo que no casa con su apariencia. Se la ve afectada y cansada.

De hecho, tal y como ella misma confirmó recientemente a LA RAZÓN, está dispuesta a cambiar de número de teléfono para no recibir más llamadas de periodistas y a hacerse a un lado hasta que el huracán mediático llegue a su fin. Se decanta por no volver a pronunciarse ni sobre este escándalo ni sobre la mala relación que mantiene con su hijo, Ángel Cristo Jr., quien se encuentra detrás de la publicación de los secretos de su madre.

Lo que sí hará será emprender acciones legales contra él, tanto por la vía civil como por la penal. Durante un tiempo intentó proteger a su hijo de que terminara en la cárcel, teniendo en cuenta que tiene antecedentes, pero considera que ha sobrepasado una línea que ya no merece su benevolencia. Va a por todas contra él, tal y como aseguraron sus abogadas a este periódico.

“Le aseguro que estamos dispuestas a llegar hasta donde sea necesario en este proceso. Los hechos son extremadamente graves”, indicaron sobre la publicación de las fotografías en las que Bárbara Rey aparece junto al Rey Juan Carlos en su casa, degustando una paella que ella misma cocinó.