Este miércoles 29 de mayo comienzan los dos días gloriosos de Taylor Swift en Madrid. La artista estadounidense que más movimiento fan genera del mundo ya ha aterrizado en la capital española bajo ingentes medidas de seguridad. No es para menos, pues la esperan 60.000 fieles para verla en acción en el Santiago Bernabéu, tanto este miércoles como mañana jueves, 30 de mayo. Todo está listo para su triunfal aparición, que ha sido medida al milímetro. Tanto, que se protege la imagen de la cantante de los flashes y miradas indiscretas hasta que se suba al escenario para ofrecer uno de sus espectáculos de su gira ‘The Eras Tour’, por el que se embolsará entre 11 y 13 millones de euros. Nada se ha dejado al azar.

Mucho menos la forma en la que se presenta a sus fans en Madrid. Es por ello que ha sido imposible captar una imagen nítida de ella a su llegada a la capital. Ya ha aterrizado en el aeropuerto y lo ha abandonado todoterreno negro que aguardaba a su llegada. Los cristales tintados han imposibilitado que miradas indiscretas se colasen en su interior. Tampoco los flashes de los profesionales gráficos apostados en las inmediaciones del aeropuerto han tenido mayor suerte. Nadie ha podido verla. Todo estaba estudiado al milímetro para que abandonase las instalaciones sin hacer demasiado ruido y generar estragos con sus fans. De ahí las fuertes medidas de seguridad a su llegada, también a su traslado al hotel de lujo en el que descansará estos días y, por supuesto, durante sus dos shows en el Bernabéu.

El vehículo en el que se encontraba Taylor Swift ha puesto rumbo directamente al hotel en el que se refugiará durante sus dos días gloriosos en Madrid. Se trata del exclusivo Hotel Rosewood Villa Magna, situada en la Milla de Oro de Madrid, zona de referencia del lujo de la capital, levantado exactamente en el paseo de la Castellana 22, a tan solo dos kilómetros del estadio Santiago Bernabéu. Ocupará una suite Royal Anglada House, de 410 metros cuadrados, formado por 260 metros de espacioso interior y una exclusiva terraza de 150 metros. Todo decorado con todo lujo de detalles y con todas las comodidades para hacer su estancia inolvidable.

Las estrictas normas de seguridad que han impuesto la organización del concierto han supuesto algún que otro quebradero de cabeza añadido para los fans de Taylor Swift. No obstante, después de desembolsar el elevado precio de las entradas, las quejan han sido discretas, pues entienden que su seguridad deba estar garantizada. Así, se han comprometido a respetar las medidas adoptadas por los responsables de la gira ‘The Eras Tour’ y que han compartido en redes sociales para no comprometer su integridad y, sobre todo, la de la artista. Entre ellas, no se puede acceder al recinto con ningún tipo de mochila, maleta o bolsos que sobrepasen unas medidas de una bolsa de plástico normal. Incluso hay restricciones de tamaño para las pancartas con las que los asistentes buscan comunicarse con su ídolo.

Para aquellos que necesiten del uso de muletas, deberán presentar un certificado médico que lo certifique. Por supuesto, nada de armas, aerosoles o dispositivos que puedan suponer un peligro y que han detallado mediante las redes sociales para evitar imprevistos. Tampoco se podrá entrar con comida o bebida del exterior, estando prohibidas las botellas de vidrio, plástico duro o aquellas de una capacidad superior a los 50 centilitros. Restricciones para algunos que son exageradas, pero siendo parte de la manada de fans de Taylor Swift que este miércoles y jueves por fin podrán disfrutarla en directo en Madrid, cumplirán a rajatabla.