Kate y el rey Carlos ven alterada su popularidad tras los ingresos

El comunicado de la Casa Real informando al mundo del ingreso de Kate Middleton como consecuencia de una cirugía abdominal programa, no cancerosa, y la inminente intervención del rey Carlos para tratarse una hiperplasia prostática benigna dejó al pueblo británico sumido en una preocupación que fue aumentando según avanzaban los días, sobre todo por el incierto estado de la princesa de Gales.

¿Fue este hermetismo motivo de malestar para los ciudadanos? Una encuesta de Ipsos, realizada mientras estaban en tratamiento reveló que tanto el rey como la princesa se beneficiaron de tres puntos porcentuales más en sus calificaciones. En contraste con ese repunte de popularidad de Carlos III y Kate, quienes han visto una nueva caída son los duques de Sussex. El príncipe Guillermo, cuya posición se mantiene inalterable desde julio pasado, sigue siendo el miembro más querido de la monarquía británica. El 62 por ciento vierte opiniones favorables sobre su figura en las encuestas. No obstante, su esposa ha acortado tanto las distancias que, de un momento a otro, no sería extraño que se produjese una especie de sorpasso, puesto que está a solo un punto porcentual de él.

En cuanto al rey, algo más de la mitad de los encuestados expresaron una opinión positiva en esta última encuesta, un 2 por ciento más que hace seis meses. Y solo el nueve por ciento considera que no está haciendo un buen trabajo, la cifra más baja en dos años.

Si nos detenemos en las valoraciones del príncipe Harry, el 47 por ciento opina de forma desfavorable y el 23 por ciento ofrece una opinión positiva, lo que indica una caída del 7 por ciento. Peores datos son los relativos a Meghan Markle. El 54 por ciento reporta sentimientos negativos hacia ella, mientras que solo el 18 por ciento le da una consideración positiva, un 5 por ciento menos que en la encuesta anterior. Es su calificación más baja en estos cinco años. La peor parte, como ya es costumbre tras sus escándalos en el caso Epstein, se la lleva el duque de York que, tras caer tres puntos, se queda en un 8 por ciento.

El pueblo británico ha agradecido la franqueza del rey Carlos III a la hora de hablar de su diagnóstico y de la importancia de las revisiones periódicas para detectar de forma temprana cualquier anomalía, sobre todo en los hombres mayores de 50. De hecho, la noticia provocó un aumento inmediato en el número de hombres que buscaban controles. Fue, además, fotografiado saludando cuando salía del hospital después de una estancia de tres noches, deseoso de demostrar que no había motivo de alarma.

Su popularidad ha ido aumentando progresivamente desde 2018, cuando solo algo más del 30 por ciento tenía una opinión positiva sobre el entonces heredero al trono.