Exclusiva
Carlos Lozano cambia la tele por los ladrillos: ahora hace de albañil y trabaja doce horas al día en el campo
El presentador lleva más de un año retirado de la pequeña pantalla y ahora desvela a ‘La Razón’ su nueva y sorprendente rutina.
Ha pasado mucho tiempo desde que poco o nada se sabe del paradero de Carlos Lozano. Después de ser uno de los grandes protagonistas para la prensa del corazón, el presentador decidía desaparecer el pasado año y alejarse de los focos por su propio bienestar emocional. Sus constantes polémicas televisadas provocaron que tomase la decisión de comenzar una nueva vida. Y así ha sido.
El protagonista ha acudido a la inauguración de la discoteca ‘Caro’ en Madrid. Allí, ha posado en el photocall junto a Arancha de Benito y posteriormente se ha parado a hablar con los medios de comunicación allí presentes, entre los que se encontraba ‘La Razón’. “Estoy desaparecido porque he querido y me hacía falta perderme. Yo tenía un desorden muy grande y necesitaba organizar mi vida”, ha comenzado diciendo.
Carlos Lozano ha explicado en exclusiva a este periódico cómo es su día a día desde que decidió tomar la decisión de desvincularse de los focos: “Me estoy haciendo una casa en el campo con un huerto, ganado, cabras, gallinas... Los fines de semana me divierto en Madrid y entre semana me voy al campo solo y aislado y recargo pilas”. El ex de Mónica Hoyos ha confesado que se levanta a las seis de la mañana y que está volcado en la construcción de la que será última casa, en la que está desempeñando labores de albañil durante doce horas diarias.
Respecto a su futura vuelta a la primera línea mediática, el presentador asegura qué “volverá” porque “le han hecho ofertas en Mediaset”, por lo que valorará a medio plazo la mejor opción para su reaparición pública.
Después de su polémica ruptura con Miriam Saaavedra, ha asegurado lo siguiente: “Yo ahora solo estoy bien. El amor llega cuando llega, no hay que buscarlo. La última vez que me enamoré fue de Miriam, pero ahora llevo un año y medio sin nadie y sin hacer nada de nada. La próxima vez que esté con alguien será con una buena persona porque no puedo cometer errores que ya cometí.”, concluye.