... y Rivera no se moverá al «sí»

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, se reunirán en el Congreso el próximo miércoles, a las 9:30 horas, según acordaron ayer sus respectivos gabinetes después de que los dos líderes hablaran por teléfono.

Fue Rajoy quien telefoneó a Rivera para acordar el encuentro y también aprovecharon para comentar la situación creada en Cataluña por el proceso independentista. «Rivera reiteró a Rajoy el apoyo de Ciudadanos al Tribunal Constitucional y al Ejecutivo en funciones para cumplir las leyes democráticas y la Constitución en el Parlament de Cataluña», informaron fuentes de la formación naranja.

Ciudadanos ya había expresado su disposición a escuchar a Rajoy si éste les llamaba para convocarles a una reunión, ya fuera bilateral o en otro formato. Sin embargo, la formación liderada por Albert Rivera dejó claro ayer en palabras del secretario del Grupo Parlamentario de C’s, Miguel Guitiérrez, que no va a negociar un cambio en su posición para la investidura, en la que asegura que dirá «no» a Rajoy en la primera votación y se abstendrá en la segunda e insiten en que es el PSOE quien debe mojarse. Sólo aceptaría votar a favor de un Ejecutivo del PP si éste fuera «con las manos libres», y «renovado» tanto en sus políticas como en sus miembros, es decir, que no incluyese al actual presidente en funciones. Una postura que explicará a Rajoy si al candidato a la investidura «no le ha quedado clara» la postura de Ciudadanos, indicó. También reiterarán a Rajoy su disposición a hacer una oposición sensata y a que, si es investido, ponerse a negociar cuanto antes el techo de déficit y los Presupuestos Generales, pero indican, que para eso, tiene que haber investidura.

En la formación naranja están convencidos de que si el líder del PP fracasa en su intento de seguir en La Moncloa se abre paso la opción favorita que presentó el jueves Rivera al Rey: el plan A; un gobierno de consenso entre PP, PSOE y Ciudadanos, pero sin Rajoy.

Asimismo, entienden que el líder del PP se tome «un tiempo» antes de pedir la confianza del Congreso, pero no quieren que se demore demasiado.