El Supremo envía a los juzgados de instrucción la investigación de filtraciones que pide García Ortiz

El juez que investiga en el Tribunal Supremo al fiscal general del Estado por la presunta filtración de un correo del letrado del novio de Ayuso ha rechazado abrir una pieza separada para indagar en supuestas filtraciones a los medios por parte de las acusaciones populares y particular que denuncia la defensa de García Ortiz.

En su lugar, el magistrado Ángel Hurtado deduce testimonio del auto y lo envía a los juzgados de instrucción de Madrid al entender que es la instancia a la que corresponde la hipotética investigación de unas informaciones que la Abogacía del Estado vinculan con el origen de un "juicio paralelo" mediático del que -defiende- está siendo víctima el fiscal general.

Sobre esta queja, advierte la Sala de lo Penal, que, por "el tipo que se trata, formulada por una parte (la Abogacía en nombre del fiscal), sobre el comportamiento de otra (acusaciones), ha de ser mirada con la suficiente cautela", porque, siendo el asunto de este procedimiento de "trascendencia mediática", "se suele olvidar de las opiniones de otros medios y determinados ámbitos que le son favorables" a García Ortiz.

Ahora, serán los tribunales ordinarios los que decidan lo que consideren oportuno: si abren o no una causa por presuntas filtraciones a la prensa de las acusaciones. El alto tribunal, por su parte, no tomará "decisión alguna que suponga la limitación del derecho a la libertad de expresión".

Lo que implicaría, según la defensa de García Ortiz, un incumplimiento de su deber de reserva de las diligencias que se vayan aprobando en esta causa por un delito de revelación de secretos contra el fiscal general y la fiscal provincial jefe de Madrid, María Pilar Rodríguez.

Su representación legal insistió ante el instructor que este "juicio paralelo" está "creando un estado de opinión" pública de que el destino del procedimiento "no puede ser otro que el de una condena" para el fiscal general y ello supone para la Abogacía una "quiebra de la presunción de la inocencia" de García Ortiz.

Hay que recordar que el juez Hurtado indaga en la posible responsabilidad penal de ambos en la aparición el pasado marzo de noticias que recogieron un correo en el que la defensa del novio de Ayuso envió al fiscal de delitos económicos madrileño Julián Salto para plantear un acuerdo de conformidad en el caso fiscal al que se enfrenta el empresario.

El "interés" obligó a incluir sus números de teléfonos

En cuanto a la otra alegación del fiscal general respecto a la inclusión de sus dos números de teléfono, uno profesional y otro personal, que fueron incluidos literalmente en el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) sobre el volcado de su móvil.

La Abogacía lo denunció ante el juez como una vulneración del derecho a la protección de datos, pero Hurtado lo rechaza al considerarlo "necesario" para la investigación, que, recuerda, no está declarada secreta.

En este sentido, rechaza, como pedía García Ortiz, trasladar a la autoridad de control de datos que se haya podido vulnerar la normativa que regula esta materia con este traslado del oficio de la UCO, y, como hizo con las supuestas filtraciones, envía con una del asunto a los juzgados de instrucción, a los efectos de lo que estime procedente.

Por último, en cuanto a la otra reclamación de la defensa letrada del máximo responsable de la Fiscalía General del Estado, no se procede a unificar las acusaciones populares en una que ejerza la dirección.