Los nuevos Reyes recorrerán las calles de Madrid tras la proclamación

Felipe VI y su esposa, la Reina Letizia, recorrerán en un vehículo algunas de las vías más conocidas del centro de Madrid tras la proclamación del nuevo Rey en el Congreso de los Diputados para dirigirse al Palacio Real, donde se celebrará una recepción.

Felipe VI y la Reina Letizia recorrerán en un vehículo algunas de las vías más conocidas del centro de Madrid tras la proclamación del nuevo Rey en el Congreso de los Diputados. Los ya proclamados Reyes se dirigirán al Palacio Real, donde se celebrará una recepción, según han informado fuentes parlamentarias a EFE. Ayer se celebró en la Cámara Baja la segunda reunión al más alto nivel de los responsables de protocolo de las Cortes Generales, la Casa del Rey y el Gobierno para cerrar los detalles de la proclamación del 19 de junio. Las mismas fuentes explican que el recorrido que harán los nuevos Reyes por las calles de Madrid será en parte similar, aunque en sentido inverso, al que hicieron hace diez años, el 22 de mayo de 2004, después de contraer matrimonio en la catedral madrileña de la Almudena. Según ya adelantó el martes el propio presidente del Congreso, Jesús Posada, además de la ceremonia en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo se celebrará un desfile militar y una posterior recepción presidida por los nuevos Reyes.

Paralelamente a los preparativos, la Familia Real sigue cumpliendo su agenda con normalidad. Media hora después de que en el Congreso se aprobara la Ley de Abdicación, los Príncipes de Asturias llegaron a la Residencia de Estudiantes para presidir la reunión anual. Desde que Don Juan Carlos anunciara la abdicación, la Familia Real ha duplicado su número de actos, y los inminentes herederos han acentuado sus apariciones públicas juntos. Esta semana sus actos han sido de marcado carácter cultural: el martes presidieron el encuentro anual con los miembros de los patronatos de la Fundación Príncipe de Asturias en el Palacio Real de Madrid, una reunión a puerta cerrada en la que Don Felipe aseguró que la Princesa y él estaban pasando por «unos momentos muy especiales» antes de ser proclamados Reyes.

Ayer, todos los miembros de la Familia Real tuvieron actividad pública, menos la Infanta Cristina, que desde 2011 no realiza ninguna actividad oficial a raíz del «caso Urdangarín». Don Juan Carlos presidió dentro de La Zarzuela una audiencia a Olegario Vázquez Raña, presidente de la Federación Internacional del Tiro Olímpico y Miembro del Comité Olímpico Internacional. Su sexto acto en una agenda muy completa y de la que aún le quedan tres actividades hasta el final de la semana, entre ellas, la audiencia al hijo de Adolfo Suárez para que devuelva el toisón de oro que Don Juan Carlos otorgó a su padre.

Por su parte, Doña Sofía se dedicó en uno de sus últimos actos como Reina Consorte a una de sus principales áreas: la de su apoyo a los más desfavorecidos. Al mediodía, minutos antes de que comenzara la votación, presidió la reunión anual del patronato de la Fundación Mujeres por África. La presidenta de la fundación, María Teresa Fernández de la Vega, tuvo que interrumpir unas palabras dedicadas a la Reina por su «constante y permanente estímulo y apoyo» debido al cerrado aplauso a la labor de Doña Sofía.