Incidentes en Sants
Primera noche sin incidentes desde desalojo Can Vies
El barrio barcelonés de Sants ha vivido su primera noche sin incidentes violentos desde que el pasado lunes fue desalojado el inmueble de Can Vies, okupado desde hace 17 años y que funcionaba como un centro social autogestinado.
Más de 300 personas se han concentrado a las 21:00 horas en la plaza de Sants para participar en una nueva cacerolada de protesta y a continuación se ha celebrado una asamblea en la que se ha informado de la situación de las 61 personas detenidas durante los incidentes de los cuatro últimos días y se ha pedido la libertad para el detenido que ha ingresado en prisión por orden judicial.
Al término de la cacerolada y la asamblea, la gente ha ido dispersándose y poco después se ha reabierto al tráfico la carretera de Sants, que anoche fue el escenario de violentos enfrentamientos entre grupos de jóvenes encapuchados y las fuerzas antidisturbios.
Representantes del Centro Social Autogestionado (CSA) de Can Vies han repartido unas octavillas entre los participantes en la cacerolada en las que señalan: "Si tan buena voluntad tiene, el Ayuntamiento lo vuelve a tener muy fácil, que nos deje volver a construir en paz lo que ellos han destruido con la violencia".
La reconstrucción del inmueble, que comenzó a ser derribado poco después de que fuera desalojado el pasado lunes, es una de las exigencias del CSA para reanudar las negociaciones con el consistorio barcelonés.
Precisamente, esta noche se ha invitado a los participantes a la cacerolada a que asistan mañana a las 10:00 horas, provistos con material de construcción, al acto convocado en Can Vies para comenzar a reconstruir el inmueble.
Los participantes en esta reconstrucción han sido convocados en Can Batlló, otro inmueble autogestionado por los vecinos que se encuentra a unos 5 minutos a pie de Can Vies, desde donde se dirigirán al edificio cuyo desalojo y comienzo de demolición ha generado cuatro noches de violencia en este barrio barcelonés.
También han sido convocados mañana a las 18:00 horas en la plaza de Sants, para dirigirse desde allí a la manifestación prevista para una hora más tarde en la plaza de la Universitat, en el centro de Barcelona.
Antes de que comenzara hoy la cacerolada en una plaza en la que no había presencia de fuerzas antidisturbios, muchos de los asistentes se han dirigido al inmueble de Can Vies, donde un hombre ha colgado una gran bandera blanca.
El Ayuntamiento ha instalado unas valla de protección de alambre en la zona en la que se concentran los escombros de los primeros trabajos del derribo y en la que todavía está la excavadora que fue incendiada el pasado martes durante los disturbios nocturnos.
En las octavillas repartidas entre los asistentes a la cacerolada se afirma que en los incidentes violentos que han ocurrido en el barrio de Sants durante las últimas cuatro noches se han registrado "más de cien heridos por la brutalidad policial y se han abierto unos 40 procesos penales".
Añaden que "esto no quedará así"porque el desalojo y derribo de Can Vies "ha colmado el vaso de la rabia por tanta injusticia social".
Piden también la dimisión del concejal del distrito, Jordi Martí, y del alcalde de Barcelona, Xavier Trias, y que se ponga fin al despliegue policial y a las amenazas de desalojo de los demás centros sociales de Barcelona, al tiempo que invitan a participar en la reconstrucción de Can Vies.
Un total de 61 personas han sido detenidas en Barcelona durante los violentos incidentes que se han registrado cada noche desde el pasado lunes por el desalojo de can Vies, en los que grupos de encapuchados han causado importantes destrozos en sucursales bancarias y otros comercios, así como en el mobiliario urbano.
El conflicto por el desalojo y derribo de Can Vies ha entrado hoy en vía muerta al rechazar el colectivo que ocupaba este edificio la posibilidad de cualquier diálogo con el ayuntamiento porque el edificio comenzó a ser demolido.
Pese a que el alcalde de Barcelona, Xavier Trias (CiU), ha ordenado paralizar la demolición como gesto de "buena voluntad"para retomar el diálogo y trasladar las actividades de este centro social okupa a otro lugar, el colectivo de Can Vies ha anunciado que no tiene "nada que negociar"con el consistorio porque se sienten engañados.
Por otra parte, alrededor de un centenar de personas, muchas de ellas provistas de antorchas, se han manifestado en Girona en apoyo a Can Vies y han lanzado pintura negra contra algunas sucursales bancarias.