Real Academia de Jurisprudencia

El jurista Navarro-Valls, sobre la objeción de conciencia: "Es un remordimiento legal"

El vicepresidente de la Real Academia de Jurisprudencia cree que las cláusulas "protectoras" muestran una "mala conciencia" por parte del poder

Entrevista a Rafael Navarro Valls.
Imagen de una entrevista a Rafael Navarro VallsJesús G. FeriaLa Razón

El vicepresidente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, Rafael Navarro-Valls, ha abordado, en una conferencia en México, la objeción de conciencia y ha opinado que es una cláusula "protectora" que da el poder ante la "mala conciencia" que tiene por las iniciativas legislativas que ha impulsado. A juicio del jurista, las cláusulas "protectoras" de determinadas objeciones de conciencia muestran lo que podría denominarse "la mala conciencia del poder", por obligar a un ciudadano a obrar contra su conciencia. De hecho, considera que la objeción de conciencia es una suerte de “remordimiento legal”.

Navarro-Valls se ha pronunciado así en la conferencia inaugural del Congreso Internacional que se celebra en la ciudad de México bajo el lema “Derecho Internacional y Estado de Derecho”, donde ha incidido en que el poder político es consciente de que "las motivaciones que mueven a un verdadero objetor son muy distintas de quien se mueve por un interés bastardo para defraudar la ley" (como la corrupción o el deseo de enriquecimiento). En este sentido, ha desgranado las dos posiciones que hay en torno a la objeción de conciencia. Por un lado, la posición "rigurosa", que considera una especie de "delirio religioso" que conviene "restringirlo" y ha puesto como ejemplos al aborto o a la eutanasia. Esta tesis, en opinión de Navarro-Valls, desconoce la flexibilidad del Derecho y de los buenos juristas, toda vez que "saben adaptarse sabiamente a las necesidades jurídicas sin grandes terremotos sociales".

Por otro lado, está la posición "correcta", a su juicio, y consiste en entender el derecho a la objeción de conciencia como un "verdadero derecho humano", una derivación del derecho fundamental de la libertad de conciencia. Y es que, para Navarro-Valls, la actual proliferación de conflictos entre conciencia y ley "descubre la vertiente ideológica por las que suele transitar en la elaboración de un derecho humano". "Pasó con las libertades de expresión y religiosa, y ahora está ocurriendo con la objeción de conciencia", ha destacado.