Tribunales

Dos etarras admiten su implicación en el asesinato de López de Lacalle

El juicio contra "Peio" y "Santi" ha quedado visto para sentencia y la Fiscalía reclama 26 años de prisión para cada uno por el mortal atentado ordenado por "Txaporte"

SAN FERNANDO DE HENARES (MADRID), 12/11/2024.- La Audiencia Nacional juzga desde este martes a los exintegrantes de la banda terrorista ETA Aitor Aguirrebarrena, alias 'Peio', y Asier Arzalluz, 'Santi', por el asesinato del periodista José Luis López de Lacalle, perpetrado el 7 de mayo del año 2000 en Andoain (Guipúzcoa). EFE/ J.P.Gandul POOL
Juicio por el asesinato del periodista José Luis López de LacalleJ.P.GandulAgencia EFE

Los etarras Aitor Aguirrebarrena, conocido como "Peio", y Asier Arzalluz, alias "Santi", han admitido este martes desde el banquillo de la Audiencia Nacional que participaron en el asesinato del periodista José Luis López de Lacalle el 7 de mayo del 2000 en el municipio guipuzcoano de Andoian.

"Sí, reconozco los hechos", han sido las palabras concretas que ambos terroristas han utilizado para responder a la pregunta que les hizo el magistrado Fernando Andreu que juzga desde este martes si fueron parte del plan urdido que acabó con el tiroteo que arrebató violentamente la vida a Lacalle.

Tanto la familia del periodista, que ejerce la acusación particular, como la Fiscalía, rechazaron realizar alguna pregunta para interrogarles en torno a los hechos y quedó así visto para sentencia.

La Fiscalía reclama para cada uno una condena de 26 años de prisión en calidad de cooperadores necesarios de un delito de terrorismo de causación dolosa de la muerte y con el agravante de alevosía.

El Ministerio Público, asimismo, pide que se les prohíba, desde el momento que salgan en libertad, acercarse durante un periodo de cinco años a la viuda de Lacalle y los dos hijos, y desembolsen entre los dos una indemnización total de 300.506 euros.

Por su parte, la familia del periodista, que ejerce la acusación particular, solicita 30 años de cárcel para cada uno.

No es la primera vez que confiesan su responsabilidad en el asesinato del periodista. El año pasado, cuando se cumplieron 23 desde el sangriento atentado, Aguirrebarrena reconoció su participación ante la jueza instructora María Tardón de la Audiencia. Había llegado de Francia, donde fue detenido en 2002, tras autorizar las autoridades francesas que fuese juzgado por la Justicia española por este asesinato. Lo mismo ocurrió, meses después, con su compañero en la banda terrorista y otro imputado en esta causa, Arzalluz.

La titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 reabrió la este procedimiento en junio de 2021 tras recibir un informe de la Guardia Civil que se basa en la declaración prestada por el exjefe de ETA Xabier García Guridi Lasa, condenado por el asesinato de Lacalle como el autor material de los cuatros disparos que acabaron con su vida. Francisco Javier García Gaztelu, "Txapote", también fue sentenciado a 30 años de cárcel en 2009 por el atentado en su condición de instigador.

Los cuatro etarras formaban el comando terrorista "Totto". "Txapote" ejercía el mando y mandó a a Guridi, que actuaba como su lugarteniente, buscar dos personas para llevar a término con ellos el asesinato de Lacalle. Según relató este lunes el fiscal en sede judicial, les entrenaron en el manejo de armamento de fuego y explosivos como paso previo a este atentado, que fue el primero para lo dos que ahora se juzga de su historial terrorista.

Aguirrebarrena y Arzalluz cumplen en estos momentos condena en Francia por otros delitos de terrorismo y el pasado mes de mayo ya fueron hallados culpables, junto a "Txapote", de la colocación en el 2000 de una bomba, que finalmente no explotó en un domicilio de la localidad navarra de Cientruénigo en el que tenían entendido que vivía un guardia civil. Se les impuso una pena a cada uno por parte de la Audiencia Nacional de otros 52 años de aprisionamiento.