La ministra de Defensa, Margarita Robles, impuso este jueves con motivo de la Pascua Militar el máxima distinción de la Armada en tiempo de paz, la Gran Cruz del Mérito Naval con distintivo blanco, al chef José Andrés por el papel de su ONG, World Central Kitchen, llevando comida y ayuda humanitaria a Siria, Turquía cuando sufrió el terremoto, a una Ucrania en guerra, y, más recientemente, a la Franja de Gaza, donde perdieron la vida el pasado 2 de abril siete de sus cooperantes, para los que este solemne acto también sirvió de recuerdo y homenaje.

Robles se dirigió al reconocido chef para explicarle que recibe específicamente esta condecoración por su vinculación con la Armada, en donde hizo el servicio militar y con quien se embarcó a finales de los años 80 en el buque escuela Juan Sebastián Elcano para desempeñarse como ayudante de cocina, y le agradeció la "lección de vida", que como los miembros de esta sección de las Fuerzas Armadas, dan cada día "acercando la paz a los lugares que hacen falta. Quiso recordar también la ministra a los trabajadores que fueron asesinados en un ataque aéreo israelí porque, defendió la ministra, "se dejaron la vida por algo tan noble, como es ayudar a los demás", ante un visiblemente emocionado José Andrés.

El Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante Antonio Piñeiro Sánchez, le agradeció al chef su presencia en el acto al ser "muy consciente de los innumerables compromisos" que ahora mismo pesan sobre él y los "sentimientos encontrados" que debe estar sintiendo por la insegura situación en la que están los cooperantes de World Central Kitchen en la guerra entre Israel y Hamás donde están tratando de ayudar a la población civil. Con esta gran cruz, señaló Piñeiro, la Armada hace patente su enorme "trabajo, esfuerzo y sacrificio" diario del que han sido testigo los militares que han coincido con él en numerosas operaciones de ayuda humanitaria. "Un enorme impulso", ha reivindicado el AJEMA, que da a la Armada "quien se mueve con el convencimiento de ayudar a los demás cuando la situación es tenebrosa o desesperante".

Unos valores de conducta, los que representa el chef y por los que ha sido condecorado, que son, expresó el AJEMA, "los más altos", que enaltecen a la institución castrense y los que hacen a la Armada estar "orgullosa de tenerte entre nosotros" como miembro de la antigua Orden del Mérito Naval. "No hay un acto tan importante como este, reconocer a los civiles que han sobresalido por su apoyo y colaboración con la Armada o que son el espejo en el que se pueden mirar orgullosos", aseguró, en el acto de entrega que acogió el cuartel general de la rama de las Fuerzas Armadas que se encarga de defender los intereses marítimos de España en todo el mundo.

La ministra Robles y el AJEMA entregaron un total de seis Grandes Cruces generales de brigada y contraalmirantes , además de 30 Cruces al Mérito Naval con distintivo blanco, como testimonio de una trayectoria larga e intachable en la que han "dedicado una vida entera a España" y en la que han destacado por su competencia, compromiso. "En donde haya un hombre o mujer de la Armada y de las Fuerzas Armadas, siempre habrá alguien trabajando por la paz, valores y un mundo más justo. Las lágrimas que habéis derramado nos da a todos los españoles la fuerza para seguir trabajando por un mundo más igualitario y paz", acabó diciendo la titular de Defensa.