El portaaviones Dédalo (R-01) es una pieza emblemática de la historia naval española, con una trayectoria que se extiende desde su origen como el USS Cabot (CVL-28) en la Armada de los Estados Unidos hasta su servicio en la Armada Española entre 1967 y 1989. Este artículo te llevará a través de la fascinante historia de esta embarcación, explorando sus orígenes, modificaciones, operaciones y el legado que dejó en la marina española.

Orígenes del USS Cabot

Construcción y botadura

El USS Cabot fue un portaaviones ligero de la clase Independence, construido durante la Segunda Guerra Mundial. Su construcción comenzó el 16 de marzo de 1942 en los astilleros de la New York Shipbuilding Corporation en Camden, Nueva Jersey. Fue botado el 4 de abril de 1943 y entró en servicio el 24 de julio de 1943. Diseñado para ser un portaaviones rápido y versátil, el USS Cabot fue equipado con una cubierta de vuelo más corta y un desplazamiento más ligero en comparación con los portaaviones más grandes de su época.

Servicio en la Segunda Guerra Mundial

Durante la Segunda Guerra Mundial, el USS Cabot desempeñó un papel crucial en el Teatro del Pacífico. Participó en numerosas operaciones importantes, incluyendo la Batalla del Golfo de Leyte y los desembarcos en Iwo Jima y Okinawa. Su capacidad para lanzar y recuperar aviones de combate lo convirtió en una pieza vital en las operaciones de superioridad aérea y apoyo a las fuerzas terrestres. El Cabot recibió la Citación de Unidad Presidencial por su desempeño destacado durante la guerra, una de las condecoraciones más altas otorgadas a una unidad militar.

Tras el final de la Segunda Guerra Mundial, el USS Cabot fue dado de baja el 11 de febrero de 1947 y asignado a la reserva en la Flota de Reserva del Atlántico. Sin embargo, con el inicio de la Guerra de Corea en 1950 y la creciente necesidad de portaaviones, el Cabot fue reactivado y vuelto a poner en servicio el 27 de octubre de 1951. Sirvió durante la Guerra de Corea y en operaciones en el Atlántico y el Mediterráneo antes de ser dado de baja nuevamente el 21 de enero de 1955.

Adquisición por la Armada Española

En la década de 1960, la Armada Española buscaba modernizar su flota y mejorar sus capacidades aéreas. El contexto geopolítico de la Guerra Fría y la necesidad de proyectar poder en el Mediterráneo y el Atlántico impulsaron esta decisión. La adquisición de un portaaviones se convirtió en una prioridad para la Armada Española, que veía en estos buques una herramienta esencial para la defensa y la disuasión.

Las negociaciones entre España y Estados Unidos llevaron a la transferencia del USS Cabot a la Armada Española. El 30 de agosto de 1967, el portaaviones fue cedido a España bajo el Programa de Asistencia de Defensa Mutua. Al entrar en servicio con la Armada Española, el buque fue rebautizado como Dédalo (R-01), en honor al mítico inventor griego y en línea con la tradición de la marina española de nombrar a sus buques en honor a figuras históricas y mitológicas.

Modificaciones y adaptaciones

Antes de su entrada en servicio activo con la Armada Española, el Dédalo fue sometido a una serie de modificaciones y mejoras. Estas incluyeron la modernización de su cubierta de vuelo para acomodar aviones y helicópteros modernos, la actualización de sus sistemas de radar y comunicaciones, y la renovación de sus sistemas de propulsión. Estas modificaciones aseguraron que el Dédalo estuviera preparado para enfrentar los desafíos operativos del entorno naval contemporáneo.

Características técnicas del Dédalo

Dimensiones y estructura

El Dédalo tenía las siguientes dimensiones y características estructurales:

• Eslora: 189.7 metros (622 pies)
• Manga: 21.8 metros (71.5 pies)
• Calado: 7.9 metros (26 pies)
• Desplazamiento: 11,000 toneladas (carga estándar) y 15,100 toneladas (carga completa)

Propulsión y velocidad

El sistema de propulsión del Dédalo consistía en:

• Motores: 4 turbinas de vapor General Electric
• Potencia: 100,000 caballos de fuerza (75 MW)
• Velocidad Máxima: 31.5 nudos (58 km/h)

Capacidad de aeronaves

El Dédalo estaba diseñado para operar una variedad de aeronaves. Su capacidad y configuración eran las siguientes:

• Capacidad de Aeronaves: Hasta 24 aviones
• Tipos de Aeronaves: Helicópteros (SH-3D Sea King), aviones de despegue y aterrizaje vertical (AV-8S Matador)

Armamento

El Dédalo estaba equipado con varios sistemas de armamento para defensa y apoyo en combate:

• Artillería:
  • 2 cañones Bofors de 40 mm
  • 4 cañones Oerlikon de 20 mm
• Sistemas de Defensa: Contramedidas electrónicas y sistemas de alerta temprana

Servicio en la Armada Española

El Dédalo entró en servicio con la Armada Española en 1967, marcando el inicio de una nueva era para la aviación naval española. Durante sus primeros años de operación, el portaaviones fue utilizado principalmente para entrenamiento y ejercicios, permitiendo a la Armada Española desarrollar y perfeccionar sus capacidades de operación con aeronaves embarcadas. El Dédalo también participó en diversas maniobras y ejercicios conjuntos con otras marinas de la OTAN, fortaleciendo la interoperabilidad y la cooperación internacional.

Operaciones y misiones

A lo largo de su servicio, el Dédalo participó en numerosas operaciones y misiones tanto en tiempos de paz como de conflicto. Durante la Guerra Fría, el portaaviones desempeñó un papel crucial en la disuasión y la vigilancia en el Mediterráneo y el Atlántico. Su capacidad para desplegar aviones y helicópteros le permitió llevar a cabo misiones de reconocimiento, patrullaje marítimo y búsqueda y rescate.

El Dédalo también fue utilizado para apoyar las actividades pesqueras y de exploración científica en las aguas españolas y en el Atlántico Norte. Su capacidad para operar helicópteros lo hacía ideal para realizar tareas de búsqueda y rescate en el mar, así como para proporcionar apoyo logístico a las flotas pesqueras.

Una de las misiones más destacadas del Dédalo fue su participación en la evacuación de civiles españoles durante la crisis del Sahara Occidental en 1975. En el marco de la Operación Golondrina, el Dédalo proporcionó una plataforma segura para la evacuación de miles de personas, demostrando su capacidad para responder a situaciones de emergencia y crisis humanitaria.

Innovaciones y desarrollos tecnológicos

Durante su servicio, el Dédalo fue testigo de varios desarrollos tecnológicos importantes en la aviación naval. La introducción de aviones de despegue y aterrizaje vertical (VTOL) como el AV-8S Matador (Harrier) representó un avance significativo para la Armada Española. Estos aviones permitieron al Dédalo operar en condiciones donde los portaaviones tradicionales habrían tenido dificultades, aumentando su versatilidad y capacidad operativa.

Reemplazo y retiro

A medida que avanzaban los años 80, el Dédalo comenzó a mostrar signos de envejecimiento, y la Armada Española reconoció la necesidad de reemplazarlo. En 1988, se decidió adquirir el Príncipe de Asturias (R-11), un portaaviones más moderno y avanzado, diseñado y construido en España. El Príncipe de Asturias entró en servicio en 1989, marcando el final del servicio activo del Dédalo.

El legado del Dédalo

El Dédalo dejó un legado duradero en la Armada Española. Su servicio proporcionó una plataforma crucial para el desarrollo y la implementación de la aviación naval en España. Las lecciones aprendidas y las experiencias adquiridas durante su operación sentaron las bases para futuras generaciones de portaaviones y operaciones aéreas embarcadas en la marina española.

Tras su retiro, hubo intentos de preservar el Dédalo como un museo flotante para conmemorar su historia y servicio. Sin embargo, debido a diversas complicaciones logísticas y financieras, estos esfuerzos no se concretaron, y el portaaviones fue finalmente desguazado en 2002. A pesar de esto, su memoria y legado continúan siendo honrados a través de exposiciones y conmemoraciones en museos navales y eventos históricos.

El diseño y las modificaciones del Dédalo influyeron en el desarrollo de futuros portaaviones y buques de guerra en España. Las lecciones aprendidas en términos de diseño de cubierta de vuelo, operaciones de aeronaves y sistemas de propulsión fueron incorporadas en el diseño del Príncipe de Asturias y otros buques de la Armada Española.