La carta de despedida clave para la española repatriada de Siria investigada por yihadismo

Un perito caligráfico determinará si la carta de despedida que la investigación policial atribuye a Yolanda Martínez Cobos, una de las dos españolas casadas con yihadistas repatriadas de Siria en enero de 2023, se escribió de su puño y letra. El magistrado Santiago Pedraz, que investiga a Martínez Cobos y a Luna Fernández por un delito de integración en organización terrorista, ha acordado en una providencia del pasado martes, a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, autorizar a un experto caligráfico a examinar, en una fecha todavía por determinar, la carta de despedida atribuida a Yolanda Martínez Cobos «a fin de determinar si dicho documento ha sido escrito por ella». Para intentar precisar este extremo, deberá comparar ese texto con «el cuerpo de escritura» que realizó a estos efectos el 20 de junio del pasado año.

Fue la propia defensa de la investigada la que solicitó que se llevase a cabo esta diligencia pericial para intentar tumbar uno de los indicios incriminatorios contra Martínez Cobos, que fuentes de la investigación califican de «fundamental» en la medida en que de esa misiva apuntalaría su supuesta decisión de trasladarse a Siria para sumarse a las filas del Estado Islámico.

En la resolución en la que acordó su procesamiento, el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional atribuía a las dos investigadas un papel relevante en el seno del grupo de mujeres de la Brigada Al-Andalus, introduciendo supuestamente a las conversas en una visión rigorista del Islam. Ambas habrían decidido trasladarse a la zona de conflicto sirio-iraquí junto a sus maridos, «con plena voluntad de mantener su integración» en Daesh, cuando Abu Bakr al-Baghdadi proclama el pseudocalifato en junio de 2014.

Según el instructor, su actuación reúne «todas las pautas de conducta que se esperan de la mujer integrada en el Estado Islámico», integrándose en dicha organización y asumiendo el rol reservado para las mujeres por la organización terrorista.

Casada con un yihadista y madre de cuatro hijos

Yolanda Martínez Cobos, madrileña de 37 años, y con cuatro hijos, es la esposa del supuesto terrorista de Daesh Omar el Harchi el Fertakh. En el auto en el que acordó su prisión provisional, el instructor se refiere a ella como «una conversa al Islam» con «un papel destacado» en el grupo de mujeres de la Brigada Al Andalus y «una visión rigorista del Islam». La investigación apunta a que compartía la ideología de su marido «mostrándose de acuerdo en no permanecer estático ante el conflicto sirio y pasar a la acción». En un vídeo del Daesh aseguraba que estaba «muy contenta». «Nos dieron una casa y a mi marido un trabajo en el juzgado del ISIS, haciendo recados. Por fin tuvimos una situación estable económica», afirmaba. Unas palabras que, según señalaba Pedraz, «la delatan» porque solo a los miembros del Estado Islámico «se les cedía una casa y se les daba un trabajo en la administración que el pseudocalifato estaba desarrollando». Pedraz ponía de relieve que haber permanecido en territorio yihadista «hasta su último bastión» en Baguz evidenciaba su «compromiso inquebrantable» con la organización yihadista.

Las dos supuestas yihadistas españolas fueron localizadas en el campo de acogida de Al Hawl, controlado por el Ejército sirio tras la caída de Baguz, donde se encontraban en calidad de «foreign terrorist fighters» (combatientes terroristas extranjeros).

Martínez Cobos –lo mismo que Luna Fernández– negó al juez su pertenencia al Daesh y dijo que solo se dedicaba a «cuidar a sus hijos».