La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, se ha desmarcado de sus compañeros de partido, afianzados en la teoría del «resistiré» y ha abogado por pedir perdón a los ciudadanos por todo lo que implica una sentencia tan dura como la del «Caso Gürtel».

La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, se ha desmarcado de sus compañeros de partido, afianzados en la teoría del «resistiré» y ha abogado por pedir perdón a los ciudadanos por todo lo que implicauna sentencia tan dura como la del «Caso Gürtel».

Ha sido a través de las redes sociales, donde la dirigente popular ha manifestado que lo que toca ahora «es pedir disculpas». Lejos de pasar por encima en un tema tan delicado, Levy ha dejado claro que «es evidente que fallaron los mecanismos de control exigibles para preservar el impecable funcionamiento» que una organización como el PP debe tener. Una situación que, a su juicio, ha provocado un «daño grave a nuestras siglas».

Y lanza un mensaje a sus compañeros de partido. En un intento por parar la debacle que parece avecinarse tras las condenas de la «Gürtel», la dirigente del PP apela al «sentido común» y a la «honorabilidad de las bases de este partido y de sus miles de cargos que trabajan día a día por sus ideales, con vocación de dignificar la política».

Levy se muestra clara y tajante: «Toca asumir la culpa de que algo falló, que no estuvimos a la altura de esa responsabilidad». Una afirmación que no está reñida con la decisión de recurrir una sentencia que «no compartimos en parte», matiza.

En su alegato, Levy hace propósito de enmienda y autocrítica, algo que se aleja mucho de la imagen que el PP y sus dirigentes quieren dar. Un caso aislado, el de la dirigente popular, que tacha de «bochornosos» los hechos condenados en la sentencia del «caso Gürtel» y exige ser «inflexibles ante la corrupción que tanto daño hace a la confianza en nuestro proyecto político para los españoles.

¿Borrón y cuenta nueva?

En un día como el de hoy, en el que Ciudadanos exige elecciones anticipadas y el PSOE registra una moción de censuracontra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el PP parece estar más solo que nunca. La idea de hacer borrón y cuenta nueva sin asumir los fallos se antoja complicada. Por este motivo, Levy reconoce que estos hechosle llenan de «tristeza», al igual que a la mayoría de cargos del partido, afiliados y votantes.

No obstante, a través de la autocrítica, anima a seguir defendiendo su trabajo «en el Gobierno y en el partido». Eso sí, con propuestas e ideas renovadas y «con humildad e ilusión», o lo que es lo mismo, pegados a la realidad y no alejados de ella. Ése es el compromiso político de Andrea Levy.