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El tiempo
Alerta de la AEMET por la llegada de la profunda borrasca Karlotta: así impactará en España
Los efectos de la borrasca comenzarán a notarse en las próximas horas. Traerá un cambio de tiempo radical
Quedan 24 horas para que comience a notarse el cambio de tiempo en España. La llegada de una nueva y profunda borrasca llamada Karlotta y sus frentes asociados dejará los próximos días fuertes rachas de viento superiores a los 100 km/hora, fenómenos costeros adversos y abundantes precipitaciones. Entre el jueves por la tarde y el domingo, se esperan precipitaciones generalizadas en todo el territorio peninsular y Baleares.
La borrasca número once de gran impacto de la temporada 2023-2024, nombrada por España a través de la Agencia de Meteorología (Aemet), afectará con mayor severidad a las comunidades del oeste y norte peninsular como Galicia, Asturias, Cantabria, Navarra, País Vasco, La Rioja, Cataluña y Castilla León, según datos de Aemet.
Durante la tarde del miércoles se esperan las primeras lluvias, que se extenderán durante el jueves a la mitad occidental peninsular, Cantábrico y Pirineo occidental y que podrían ser localmente fuertes y persistentes en Galicia y oeste del sistema Central.
Respecto al viento, el área más afectada el jueves será el cuadrante noroeste peninsular, con rachas muy fuertes en amplias zonas. Serán especialmente intensas en la Cordillera Cantábrica y en Galicia, donde se podrían superar los 100 km/h, con un fuerte temporal marítimo en las costas gallegas, donde podrían aparecer olas de unos siete metros.
También se esperan rachas muy fuertes en otros sistemas montañosos de la península, como Pirineos, el Sistema Ibérico, el Sistema Central y, a últimas horas del día, en los sistemas béticos.
Las precipitaciones se generalizarán el viernes a la “práctica totalidad” de la península, según la Aemet, y afectarán también a Baleares, Ceuta, Melilla y el norte de Canarias. Lloverá más en Galicia, el cuadrante suroeste peninsular y los Pirineos. Las precipitaciones serán más débiles y menos probables en el área cantábrica, los extremos nordeste y sudeste peninsulares, Baleares y Canarias.
Estas precipitaciones serán en forma de nieve en las montañas de la mitad norte peninsular por encima de 1.500-2.000 metros y por encima de 2.000 metros en Sierra Nevada. Las temperaturas descenderán en la península y Baleares, acusadamente en la mitad sudeste peninsular y sin grandes cambios en las Canarias.
El viento en el cuadrante noroeste peninsular y en el resto de los sistemas montañosos irá perdiendo intensidad progresivamente, aunque podrán darse rachas muy fuertes durante la primera mitad del viernes, sobre todo en la Cordillera Cantábrica y en Pirineos. Por el contrario, arreciará el viento en el sur, con probables rachas muy fuertes de poniente en litorales de Andalucía, tanto atlánticos como mediterráneos, así como en Ceuta, con el consiguiente temporal costero en el golfo de Cádiz, el área del Estrecho y el mar de Alborán. Con alta incertidumbre, el temporal de viento podrá afectar también a Baleares, siendo más probable en las islas Pitiusas.
El sábado se espera “una situación postfrontal”, con lo que el tiempo estable irá imponiéndose progresivamente y finalizaría el temporal. Aunque las precipitaciones irán perdiendo intensidad y tenderán a remitir, todavía se esperan en el área Cantábrica, la mitad este peninsular, Ceuta, Melilla y Baleares, más probables e intensas durante la primera mitad del día.
Las temperaturas bajarán acusadamente, lo que conllevará un descenso significativo de la cota de nieve, que se situará entre 1.000 y 1.500 metros, con nevadas débiles en los principales sistemas montañosos de la península, principalmente en Pirineos.
En cuanto al viento, se establecerá cierzo en el valle del Ebro y tramontana en Ampurdán (Girona), con probables rachas de viento muy fuertes. Y continuará el temporal marítimo en Alborán, que se extenderá también al Mediterráneo, con probables rachas muy fuertes de poniente en litorales de Andalucía oriental, Melilla, montañas del sureste peninsular y en Baleares. A últimas horas del sábado se espera que el viento empiece a perder intensidad.
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