La "Generación Faster" desafía las metodologías tradicionales de enseñanza

En un contexto en el que el uso de la tecnología lidera la narrativa actual, la Generación Z, también conocida como la Generación Faster, emerge como un desafío para las instituciones educativas. Con un tiempo de atención promedio de apenas 8 segundos y una velocidad para el consumo de nueva información sin igual, se hace más necesaria que nunca una metodología educativa adaptada a las necesidades del alumno de hoy.

En esta nueva edición de Deep Talks, “Generación Faster, ¿Educación a doble velocidad?”, impulsada por Planeta Formación y Universidades, expertos en diferentes disciplinas como la neurociencia, la transformación digital o la educación, se han unido para debatir en torno a los retos del sector educativo, y cómo está respondiendo a las demandas de esta nueva generación de estudiantes, probablemente la mejor preparada de la historia, pero también la más condicionada por el contexto tecnológico en el que viven.

Este foro de debate contó con la participación de Alexia de la Morena, doctora en Neurociencia y Directora del Máster de Marketing y Gestión Comercial en EAE Business School; Eduard Contijoch, Director del Máster de Transformación Digital e Innovación en Inesdi Business Techschool y Senior manager de Indra Minsait; Víctor Manuel Andrés, Profesor del Máster Universitario de Metodologías Activas y Digitales y Coordinador del Máster de Formación del Profesorado en la Facultad de Ciencias de la Educación de VIU; y Raquel Pardeiro, psicóloga especialista en terapia humanista existencial en el Centro Psicológico Cepsim.

Para estos expertos, se trata de una generación muy pragmática, con capacidades digitales innatas, que trabaja bien en equipo y son auténticos estrategas en lo que respecta a encontrar soluciones rápidas dedicando el tiempo justo a la realización de las tareas. Viven de forma constante en la cultura de la inmediatez y esto condiciona su modo de aprendizaje y atención. Para estos especialistas, resulta determinante canalizar esas características y aptitudes, evitando la pérdida de atención en las aulas y logrando que los jóvenes obtengan el mayor rendimiento formativo.

Así, la psicóloga especializada en la Generación Z (nacidos entre 1995 y 2010), Raquel Pardeiro, destacó que al estar acostumbrados a consumir información de manera rápida y a través de varios frentes, se han modificado sus patrones de aprendizaje. "La generación Z se ha criado en un contexto de evolución constante, donde el acceso ilimitado a la información ha condicionado su forma de interactuar y aprender". "Son una generación que se mueve a gran velocidad, tanto en el consumo de contenido como en la realización de tareas cotidianas”. “No obstante,aunque esta generación pueda parecer superficial debido a su consumo acelerado de información, también son capaces de mantener la atención en temas que realmente les interesan”, resaltó.

“Es una generación que desde siempre ha tenido toda la información a golpe de clic y, por ello, valora mucho el tiempo y la efectividad. Es precisamente ahí donde desde la educación debemos buscar el equilibrio entre esa rapidez y hacerles entender la necesidad de profundizar en conceptos que son importantes”, añade Victor Manuel Andrés. “Es necesario hacer ver a esta generación los beneficios de desarrollar habilidades para sumergirse en conceptos más complejos”, concluye.

Para Alexia de la Morena la clave reside en “trabajar en todo momento contenidos extremadamente concisos y de gran calidad o micro learnigs, y que tengan un efecto wow”.

“Speed Education”: metodologías activas y formación agile como respuesta

Ahondando en esta idea, Eduard Contijoch, explicó, a partir de su experiencia con la transformación digital, que el desafío no reside únicamente en la tecnología que se utilice en las aulas, sino en la metodología implementada. "Es importante cambiar la forma en la que se estructuraban hasta ahora los contenidos en las aulas. Tenemos que ser capaces de adaptarlos a ciclos cortos y ágiles, de manera que los estudiantes puedan conectar constantemente con lo que se está enseñando. Se trata de fragmentar las clases en micro clases, dentro de una misma sesión, de forma que vayamos acordes con los tiempos en los que esta generación está acostumbrada a mantener la atención, y de ahí pasar a la siguiente etapa".

Por su parte Víctor Manuel Andrés recordó que en la Generación Z funciona especialmente bien el apoyo de contenido multimedia de corta duración y añadió que las metodologías activas, como el aula invertida o el aprendizaje basado en proyectos, han demostrado ser efectivas para esta generación ya que conectan bien con sus características y aptitudes y fomentan la participación de los estudiantes y el trabajo colaborativo”. “Se trata de micro aprendizajes que permiten al alumno obtener un feedback rápido y constructivo a la vez, lo que nos ayuda a mantener su interés y atención”.

Igualmente, los expertos reunidos en este foro de debate coincidieron en destacar la relevancia de la capacidad de reflexión y pensamiento crítico y la importancia de potenciarla desde las aulas, ayudándoles así a reconocer informaciones de valor respecto de las que no lo son; algo que resulta clave en el mundo en el que se mueve el alumnado de hoy, que dispone de acceso permanente y continuado a información en constante evolución.

Para Alexia de la Morena, resulta clave trabajar en la construcción del pensamiento crítico, así como fomentar la capacidad analítica de esta generación para transformar la información en un conocimiento aplicable. "No basta con ofrecer información rápida; es crucial enseñarles a profundizar y reflexionar", afirmó.

A este respecto, el foro contó también con la presencia telemática de Valentino Megale, docente de Digital Technology y Health and Business Management de la Rome Business School.Para Megale, “los educadores hoy tienen la responsabilidad de capacitar a los estudiantes y profesionales, no solo para generar respuestas de calidad, sino para ser capaces de hacerse las preguntas relevantes. Como educadores, debemos proporcionarles un conjunto de habilidades, especialmente el pensamiento analítico, metodológico y creativo para poder abordar problemas complejos desde diferentes ángulos, de forma que cuestionen las situaciones, para luego ser capaces de pensar en las soluciones”.

Nuevas habilidades para un mercado laboral camaleónico

La sesión concluyó con una reflexión sobre las habilidades que la Generación Faster necesita para triunfar en el mercado laboral. Según los expertos, esta generación no solo debe ser competente en el uso de tecnologías, sino también en habilidades interpersonales y de inteligencia emocional. "En un mundo donde la información está a un clic de distancia, la capacidad de aplicar este conocimiento en situaciones reales es fundamental", afirmó Alexia de la Morena.

Eduard Contijochcerró el debate con un mensaje clave: “el reto no es solo para la Generación Faster, el reto es también para nosotros, los educadores, que debemos ser capaces de adaptar nuestras metodologías a esta nueva realidad".