Prohibir por ley los despidos colectivos en empresas que den beneficios. Así lo ha vuelto a defender la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que asegura que impedirá expedientes de regulación de empleo (ERE) a través de la Ley de Industria. Díaz vuelve a la carga con esta vieja aspiración, que ha vuelto a la palestra con los expedientes que han abierto la tecnológica Zegona sobre la plantilla de Vodafone en España.

La ministra fue clara: "Quiero deciros que en absoluto comparto, lo vuelvo a decir hoy aquí, que una empresa que tiene beneficios pueda acudir a un expediente". Lo ha afirmado durante su participación en la clausura de las 'III Jornadas Confederales LGTBI' de UGT en Madrid. "Nadie comprende cómo es posible que una empresa que tenga beneficios acuda a un expediente colectivo de regulación de empleo", ha subrayado.

Díaz vuelve a chocar de frente con los empresarios, cuya relación pasa por el momento más bajo de sus dos mandatos. Tras el último desencuentro en la mesa de diálogo social por la reducción de jornada, los empresarios amenazan con movilizaciones e incluso con un paro patronal como medida extrema para hacer recapacitar a la ministra para que cambie su "alarmante intransigencia" y para la "vuelta al diálogo social y que no sea un monólogo del Gobierno". Toda la frustración empresarial quedó plasmada en un durísimo e histórico manifiesto en el que denunciaron la falta de respeto a las negociaciones de los convenios colectivos entre patronales y sindicatos, las acusaciones de injerencia externa en las decisiones privadas empresariales y el intervencionismo en las tablas salariales y en el ordenamiento interno de las empresas.

Este plante de CEOE y Cepyme a seguir negociando en la mesa de la reducción de jornada -porque "es un monólogo del Gobierno en el que sólo vale lo que presentan ellos"- parece que ha hecho mella en el Ministerio de Trabajo, que estaría dispuesto a "cierta flexibilidad" en la distribución de las horas. Lo confirmó ayer, el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, se ha abierto a seguir negociando sin "fecha de caducidad" con patronal y sindicatos para pactar una reducción de la jornada laboral negociada con los empresarios.

El propio ministro de Economía, Carlos Cuerpo, çree que "existe margen" para llegar a un acuerdo y ha puesto encima de la mesa la posibilidad de flexibilizar los plazos de aplicación o aumentar las "bolsas de horas" en algunos sectores, que reclama la patronal. "Es lo que viene defendiendo la CEOE", porque "en el comercio, en la hostelería, en las pequeñas empresas de menos de cinco trabajadores, que es el 90 %, o se ponen medidas alternativas, como se han puesto en otros países, o desde luego no hay nada que hacer".

Esta nueva andanada de Díaz tiene que ver con las intenciones del fondo británico Zegona, al frente de Vodafone España desde junio, de presentar un ERE que afectaría a 1.198 trabajadores de la compañía, aunque esta cifra podría rebajarse en 100 personas afectadas, hasta las hasta 1.098, el quinto que afecta a la compañía en España desde 2013. Estos despidos colectivos -sin tener en cuenta el proceso actual- han supuesto la salida de la empresa de alrededor de 3.200 empleados. En 2013 la empresa ejecutó un ERE que afectó a 620 trabajadores, mientras que en 2015 hubo otro que supuso el despido de 1.059 personas. A ese le siguió otro en 2019 en el que salieron 1.102 empleados, mientras que en 2021 la plantilla se redujo en 442 efectivos.