Las pensiones son ingresos regulares que las personas reciben cuando se retiran del mercado laboral, generalmente después de alcanzar la edad ordinaria de jubilación o haber trabajado durante un número de años. Este dinero proviene de los aportes que han hecho a lo largo de su vida laboral, ya sea a través de un sistema público o privado, y está destinado a cubrir sus necesidades en la vejez.

Para aquellos que están próximos a jubilarse, la preocupación por la cantidad de la pensión que recibirán es frecuente. Muchos temen que la subvención no sea suficiente para mantener su estilo de vida, sobre todo si los aportes fueron bajos o si el sistema de pensiones enfrenta dificultades financieras. Una incertidumbre que suele generar ansiedad y que, en ocasiones, puede llevar a algunos a buscar alternativas para complementar sus ingresos en la jubilación.

En este sentido, existen algunos cambios en las pensiones que, probablemente, generará incertidumbre entre los jubilados.

Cambios inesperados

Muchos jubilados se pensaban que, gracias a la revalorización de las pensiones conforme al Índice de Precios al Consumo (IPC), el aumento económico de la prestación iba a ser considerable de cara al 2025. Sin embargo, debido a la situación actual del IPC, puede que estas previsiones cambien y sean menos favorables.

La comunidad de pensionistas y jubilados tenía la expectativa de conseguir una mejora progresiva de su poder adquisitivo con el inicio del año 2024, siguiendo la tendencia positiva de años anteriores. Sin embargo, debido a la evolución en negativo del IPC, ya que en enero el Índice se situaba cerca del 3,4% y en septiembre bajó al 1,5%, los jubilados están viendo cómo ha generado un desajuste en las pensiones.

Nueva revalorización de las pensiones en 2025

De esta manera, la incertidumbre se enfoca en las próximas revalorizaciones de las pensiones de cara al próximo año 2025. Aunque se espera que, debido a la devaluación del IPC, cesen las subidas, el impacto exacto en cada tipo de pensión, especialmente las de incapacidad permanente, todavía no se conoce, aunque se espera un incremento de entorno al 2%.

No obstante, con esta subida, muchos pensionistas tendrán dificultades para afrontar la vida diaria, debido al encarecimiento en los costes de vida, por lo que se prevé que un aumento cercano al 2% no sea suficiente.

Así, los pensionistas tendrán que esperar hasta el próximo mes de diciembre para conocer cuál es el impacto real de la devaluación del IPC durante este 2024, concretamente hasta el 13 de diciembre, cuando se hará oficial cuál será el incremento real de las pensiones de cara al 2025.