Vivienda

Uno de cada tres españoles compra vivienda a "tocateja", una cifra cada vez mayor: ¿quién paga así y por qué?

Es una opción cada vez más popular para evitar el encarecimiento y endurecimiento de las hipotecas

 Una pareja se detiene a observar las propiedades en venta anunciadas en el escaparate de una agencia inmobiliaria de Menorca.
Una pareja se detiene a observar las propiedades en venta anunciadas en el escaparate de una agencia inmobiliaria de MenorcaDavid Arquimbau SintesAgencia EFE

Comprar casa al contado, una alternativa no al alcance de todos pero cada vez más popular para esquivar los altos intereses de los créditos hipotecarios que ofrece actualmente la banca. En concreto, el 35% de los españoles compra vivienda sin financiación, a "tocateja", un porcentaje que se ha incrementado desde el 32% que representaba en 2023 o del 27% de 2022, según un estudio elaborado por el portal inmobiliario Fotocasa. Pero, ¿cómo? El 17% de estos nuevos propietarios que no necesitaron hipoteca culminó la compra mediante sus propios ahorros, el 10% se valió del respaldo de familiares y el 7% afrontó la operación gracias a la venta de la antigua vivienda.

"Desde la primera subida de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo en 2022, se detecta un incremento de ocho puntos porcentuales en los compradores de vivienda que no solicitan préstamos hipotecarios. Este cambio de tendencia se debe al encarecimiento y endurecimiento de las hipotecas, que los ciudadanos intentan sortear obteniendo financiación alternativa como ayuda familiar, utilizando ahorros previos o incluso vendiendo su actual vivienda para comprar la siguiente. Son fórmulas alternativas para evitar contratar un préstamo en una entidad bancaria, mientras los tipos de interés se mantengan en niveles considerados por los compradores como poco atractivos", comenta María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.

El comprador más habitual que no necesita hipoteca es una mujer (56%) con una edad media de 49 años y que en un 39% de los casos vive únicamente con su pareja, sin hijos. Además, en un 29% de los casos es de clase media-alta. La mitad de quienes no solicitan una hipoteca (49%) contaban con ahorro suficiente y solo un 10% pidió un préstamo para pagar los gastos iniciales, es decir, notario, impuestos, entrada, etcétera.

El grueso de los compradores (66%), sin embargo, sigue necesitando firmar una hipoteca para convertirse en propietarios. De manera desglosada, ese 66% se integra de un 54% que únicamente recibió financiación bancaria mientras que otro 12% necesitó, además del préstamo hipotecario, la ayuda familiar para efectuar la compra. Además, la mayoría vivían antes de alquilery solicitan más préstamos vinculados con los pagos iniciales. Son un 56%, un porcentaje algo mayor que el pasado año, cuando eran el 52%. Entre los que necesita hipotecarse la media es de 42 años, en un 36% de los casos vive solo con su pareja y en otro 36% de los caso con su pareja e hijos. Un 40% son de clase media-alta.

Los expertos esperan que el auge de la compra de vivienda al contado no se perpetúe en el tiempo y que la firma de hipotecas repunte. A mediados de septiembre, el Banco Central Europeo (BCE) bajó los tipos un cuarto de punto por segunda vez este año y no se descarta un nuevo recorte de tipos antes de que acabe 2024. Estas rebajas se trasladarán a las hipotecas y reactivarán la competencia entre las entidades para captar clientes con créditos baratos.