Vivienda
Soy autónomo y quiero comprar una casa: ¿es difícil conseguir una hipoteca?
Uno de los requisitos suele ser tener al menos dos años de antigüedad cotizando en este régimen
Comprarse una casa entra en los planes de futuro de muchas personas en nuestro país. Sin embargo, esta operación supone un gran desembolso de dinero que puede alcanzar fácilmente los cientos de miles de euros o incluso el millón, por lo que solicitar un crédito hipotecario se vuelve un requisito imprescindible. Conseguir que la entidad financiera de luz verde a la concesión de una hipoteca suele ser una de las “pruebas de fuego” por la que tendrán que pasar todas las personas antes de tener una casa en propiedad. Y es que los bancos examinarán numerosos factores como los condicionantes personales del comprador, si tiene nómina o no o incluso la situación laboral del interesado en su solicitud. Entonces, ¿es difícil conseguir una hipoteca siendo autónomo? Desde el portal inmobiliario pisos.com explican que a los trabajadores por cuenta propia se les suelen exigir más garantías que a los que trabajan por cuenta ajena, ya que es necesario que estos aporten más documentación para probar su solvencia e ingresos recurrentes.
El autónomo deberá demostrar que tiene ingresos suficientes para pagar la cuota mensual de la hipoteca, para ello será imprescindible aportar toda la documentación que el banco solicite como extractos de la cuenta, el resumen anual del IVA, el pago del recibo de autónomos, las declaraciones del año en curso o incluso la vida laboral, entre otras. Además, "suele ser común pedir al menos dos años de antigüedad cotizando en este régimen", explica el portal inmobiliario.
Asimismo, el banco también comprobará que el autónomo no tiene deudas pendientes y que paga las facturas tanto de suministros como de proveedores. Desde el portal inmobiliario explican que se debe procurar "llevar todos los préstamos liquidados" cuando se visite a la entidad bancaria para demostrar así su solvencia.
Las entidades bancarias no suelen ofrecer el 100% del valor de la vivienda, por lo que el autónomo tendrá que tener el 20% del precio total ahorrado e incluso el 30% para cubrir los gastos que deriven de la compraventa de la vivienda como la tasación, notaría, registro, gestoría, impuestos, etc. "La documentación que les entregues de todo lo que ingresas y gastas es también una pista de como gestionas tu empresa, que no haces gastos superfluos y que no vives al día. Debería bastar el hecho de que ya tienes ahorrada la parte que ellos no te van a financiar, pero quieren tener claro que hay una regularidad y que has asumido un hábito de ahorro", explica pisos.com.
Además, será una ventaja para aquellos que quieran conseguir la financiación aportar todo lo que puedan como garantía, como es la figura del avalista o incluso poner un inmueble en propiedad. Los autónomos son vistos como un perfil de mayor riesgo, ya que tienen menos estabilidad que un asalariado, ya que los ingresos fluctúan mes a mes. Por tanto, los bancos establecen unos términos de acceso "más estrictos", así como unas condiciones "menos atractivas" como unos tipos de interés más altos o alguna que otra comisión. "Si tu trayectoria es intachable y eres un autónomo asentado, no dudes en acudir a otras sucursales y hacerte valer como un perfil digno de ser captado. En última instancia, si vas de la mano con tu pareja y esta es indefinida por cuenta ajena, te servirá de argumento de peso", sentencian desde el portal inmobiliario.