Indra revoluciona la simulación en la aviación militar

El sector de la aviación militar ha experimentado una transformación significativa en los últimos años gracias a los avances en tecnología de simulación. La implementación de sistemas de entrenamiento de última generación no solo permite mejorar la capacitación de los pilotos, sino que también optimiza costos operativos y reduce riesgos asociados a la formación en aeronaves reales. En este contexto, Indra, una de las compañías líderes en simulación aérea, ha desarrollado y entregado un nuevo simulador del helicóptero NH90 al Ejército del Aire y del Espacio español en la base de Cuatro Vientos. Este innovador sistema no solo proporciona un realismo excepcional, sino que también refuerza la capacidad de entrenamiento conjunto e interoperabilidad con otras bases militares.

El simulador del NH90 desarrollado por Indra es el tercero de su tipo en las Fuerzas Armadas españolas y se suma a los dos ya operativos en la base de Agoncillo, en La Rioja. Esta versión incorpora las últimas innovaciones tecnológicas.

El simulador, que ha sido desarrollado mediante un contrato gestionado por la Oficina de Programa NH90 (Jefatura de Sistemas Aéreos de Ala Rotatoria) de la SDG de Programas de la DGAM, vuelve a apostar por el uso de los equipos de aviónica (conjunto de sistemas electrónicos y tecnológicos) de la propia aeronave para replicar de forma fiel la cabina y asegurar que el piloto se familiariza con el equipamiento de navegación y misión real. Además, el sistema incluye un casco de misión con equipamiento de visión nocturna, proporcionando un entrenamiento altamente realista. Estas características hacen que el simulador de Indra sea una referencia en el sector, garantizando una formación precisa y efectiva para las tripulaciones.

El simulador ha mejorado considerablemente su sistema visual, incorporando bases de datos con escenarios altamente detallados. Esto permite a los pilotos entrenar en diferentes contextos operacionales, incluyendo misiones de salvamento marítimo, respuesta a desastres naturales y aterrizajes en entornos difíciles. Además, el sistema cuenta con la capacidad de interoperar con otros simuladores a través del estándar de arquitectura HLA. Esto significa que las tripulaciones pueden realizar entrenamientos conjuntos con los simuladores NH90 de la base de Agoncillo, creando un auténtico «campo de maniobras virtual», en el que pueden practicar y repetir maniobras complejas hasta alcanzar la máxima precisión.

El simulador ofrece una excelente capacidad para interoperar con otros sistemas, facilitando un entrenamiento conjunto y permitiendo a las fuerzas militares mejorar su nivel de coordinación en situaciones de alta exigencia.

Los simuladores modernos han demostrado ser herramientas esenciales para cualquier ejército que busque mejorar la seguridad y eficiencia de sus pilotos. La posibilidad de practicar maniobras de alto riesgo sin exponer a los tripulantes a peligros reales es una de las principales ventajas de estos sistemas. Situaciones como el fallo de un motor o el rotor de cola pueden ser entrenadas en un ambiente completamente controlado, lo que permite a los pilotos reaccionar de manera más efectiva en caso de emergencia.

Otro aspecto clave de estos simuladores es su impacto positivo en la reducción de costos operativos. Según datos de Indra, el uso del Full Mission Simulator (FMS) puede cubrir hasta un 40% las horas de vuelo requeridas para la formación de un piloto, reduciendo significativamente los costos de combustible, mantenimiento y desgaste de las aeronaves. Además, el uso del simulador contribuye a la sostenibilidad ambiental al evitar emisiones innecesarias de CO2 y reducir los trabajos de mantenimiento en más de un 33%.

Estándares más exigentes

En el caso específico del NH90, Indra se ha convertido en uno de los principales fabricantes de simuladores para esta plataforma, utilizada por una decena de ejércitos en el mundo. La complejidad de los sistemas del NH90 hace que su simulación sea un desafío, pero Indra ha logrado desarrollar una solución que cumple con los estándares más exigentes de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA). De hecho, este nuevo simulador está siendo evaluado bajo la normativa CS-FSTD(H) para obtener la certificación FFS nivel D, el más alto nivel de realismo y precisión disponible en Europa.

Indra se ha consolidado como un referente indiscutible en el ámbito del desarrollo de simuladores de aviación militar, destacándose por su innovación, tecnología de vanguardia y capacidad para adaptarse a las necesidades específicas de sus clientes. A lo largo de los años, la compañía ha entregado más de 200 simuladores en 23 países, estableciendo una presencia global sólida y construyendo relaciones estratégicas con más de 50 clientes en todo el mundo.

Gracias a su compromiso con la excelencia y la mejora continua, la compañía tecnológica española ha desarrollado soluciones de entrenamiento avanzadas y altamente especializadas que permiten a las fuerzas aéreas optimizar sus procesos de formación, mejorar la operatividad de sus pilotos y reducir costos asociados a la instrucción en aeronaves reales.