El euríbor sigue saltando barreras y poniéndole cada vez más difícil las cosas a los que tienen una hipoteca a tipo variable. El indicador de referencia de la mayoría de estos préstamos ha superado hoy la barrera del 3,5% en tasa diaria. En concreto, ha escalado hasta el 3,51%, un nivel que no se veía desde diciembre de 2008. La media del mes de febrero queda así en el 3,44% con sólo nueve días cotizados, lo que encarecería una hipoteca tipo de 180.000 euros a 25 años y con un diferencial del euríbor más un 1% y revisión anual en 343 euros mensuales. O, lo que es lo mismo, en 4.116 euros al año.

El indicador, que transitó durante varios años en terreno negativo, empezó su tendencia alcista el 4 de febrero del año pasado, después de que el Banco Central Europeo (BCE) admitiera que podría subir los tipos de interés oficiales debido al aumento de la inflación en la zona euro. Una tendencia que se reforzó con el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania el 24 de febrero de 2022.

Más subidas a la vista

La mala noticia para los hipotecados es que los indicios y certezas de las últimas semanas apuntan a que su escalada no se detendrá a corto plazo. Cumpliendo con el patrón esperado por los analistas, el BCE incrementó el pasado día 2 de febrero el precio oficial del dinero para la eurozona en 50 puntos básicos, hasta el 3%, su nivel más alto desde diciembre de 2008, el quinto aumento que aprobaba el organismo que dirige la francesa Christine Lagarde desde julio del año pasado.

Al subir los tipos de interés, a las entidades financieras les cuesta cada vez más pedirle dinero prestado al eurobanco. Y en consecuencia, incrementan también el interés que aplican a los préstamos que se conceden entre ellas, que es el que se usa para calcular el valor del euríbor. Como apuntaban entonces desde el comparador financiero HelpMyCash, lo habitual es que el euríbor supere al precio oficial del dinero en una horquilla que oscila entre 0,5 y 1 punto, con lo que la decisión del BCE apunta a que el diferencial al que están referenciadas la mayoría de hipotecas variables españolas tocará más pronto que tarde el 4%.

En caso de que el euríbor llegue finalmente hasta ese 4% en este mes, una hipoteca tipo de 150.000 euros a 25 años con un interés de euríbor más 1% que se revise anualmente con el valor de este mes se encarecerá en unos 334 euros mensuales. O, lo que es lo mismo, en poco más de 4.000 euros más al año.

Pese a ello, hay entidades como CaixaBank que consideran, no obstante, que aunque el euríbor alcance el 4%, sus hogares clientes con una hipoteca a tipo de interés variable no destinarían más del 30% de sus ingresos en el caso de que alcanzase tal nivel.

Camino del 4%

De no llegar en febrero, es muy probable que el euríbor toque el 4% en marzo. La subida de tipos de interés de inicios de mes no será la última que apruebe la institución monetaria que dirige Lagarde. El Banco Central Europeo advirtió tras esa reunión de que habrá más para tratar de devolver la inflación al 2%, el nivel que la institución considera óptimo para la economía europea. El consejo de gobierno de la entidad «continuará el curso de subidas significativas a ritmo sostenido de los tipos de interés y los mantendrá en niveles suficientemente restrictivos para asegurar el retorno oportuno de la inflación a su objetivo del 2% a medio plazo», según explicó en un comunicado. «En vista de las presiones sobre la inflación subyacente, el consejo de gobierno prevé aumentar los tipos de interés otros 50 puntos básicos en su próxima reunión de política monetaria de marzo y posteriormente evaluará la senda futura de su política monetaria», anunció el organismo que dirige Lagarde.

Aunque en la posterior rueda de prensa tras el anuncio de la subida la presidenta del BCE aseguró que la intención de subir los tipos de interés de nuevo en marzo en medio punto porcentual «no es un compromiso irrevocable», también hizo hincapié en que son necesarias más subidas significativas de los tipos para que la inflación baje a su objetivo del 2% a medio plazo. Al ser preguntada si después de marzo habrán concluido con las subidas de los tipos de interés y éstos habrán llegado al máximo en este ciclo alcista, Lagarde aseguró que no. «Sabemos que tenemos terreno que cubrir», lo que implica que los tipos de interés lleguen a un nivel restrictivo, en el que restringen el crecimiento económico, y que permanezcan en ese nivel el tiempo necesario para que la inflación baje al 2%, explicó la presidenta del BCE.