Vivienda

Estos son los impuestos y gastos que debe pagar al comprar su vivienda

La adquisición de una vivienda es cada vez más cara por factores como la subida de tipos de interés o el encarecimiento del precio de la hipoteca

Cartel de venta en un edificio de la capital
Cartel de venta en un edificio de la capitalAlberto OrtegaEuropa Press

La compra de una vivienda entra en los planes de futuro de miles de españoles, pese a que esta operación no está al alcance de todos. La inflación disparada, la subida de tipos de interés y el encarecimiento del precio de la hipoteca media son algunos de los factores que están contribuyendo a que cada vez menos personas puedan llegar a ser propietarios de su propio hogar.

Por tanto, el adquirir un inmueble trae consigo una serie de gastos e impuestosa los que el comprador debe hacer frente, siendo una de las inversiones económicas más significativas de su vida. En este sentido, el comprador deberá abonar unos gastos derivados de la compraventa y en el caso de solicitar un crédito hipotecario al banco, este préstamo también tendrá asociados una serie de gastos e impuestos, tal y como explican desde el portal inmobiliario Fotocasa.

En primer lugar, aquellas personas que estén comprando una vivienda nueva o usada, deberán hacerse cargo de los gastos de notaría o aranceles en el momento de su contratación por los servicios realizados. Estos gastos están fijados por el Ejecutivo, por lo que todos los notarios cobrarán la misma cuantía por los mismos servicios, cuyo precio irá desde los 600 hasta los 1.000 euros dependiendo del coste de la vivienda.

Al igual que en el caso anterior, el abono de impuestos dependerá del precio y condición del inmueble, tanto si es nueva como de segunda mano. En el caso de que la vivienda sea usada, el mayor impuesto que se deberá abonar será el Impuesto sobre las Transmisiones Patrimoniales (ITP), cuyo coste irá desde el 6% hasta el 10% dependiendo de la autonomía donde se resida y de la proporción impuesta sobre el precio escriturado. Los compradores tienen un plazo máximo de 30 días desde que se realiza la escritura para abonar el pago a la Agencia Tributaria de su comunidad autónoma.

En cambio, si la vivienda es de obra nueva, el impuesto más importante es el IVA, siendo del 10% en la península, mientras que en Canarias es del 6,5% ya que corresponde al Impuesto General Indirecto Canario (IGIC). Ambos impuestos deben pagarse al vendedor o la entidad junto con el dinero para comprar el inmueble. Asimismo, se tiene que abonar el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD) el cual cambia según la comunidad autónoma.

Otro de los gastos extra asociados a la compraventa de una vivienda es cuando se inscriben las escrituras en el Registro de la Propiedad tras haber sido firmadas por el notario. La cuantía es fijada por el Estado según el coste de la vivienda y puede ir entre los 400 y 700 euros. Esta debe abonarse al efectuar el registro, ya sea presencialmente o a través de internet.

Por último, en el caso de que el comprador contrate a una persona para que gestione toda la documentación y gastos de la operación, esto sumará un gasto extra que se pagará al contratar los servicios y dependerá de cada una de las entidades.

¿Qué gastos están relacionados con la hipoteca?

En el caso de que una persona decida contratar una hipoteca, los compradores deberán abonar una serie de gastos e impuestos adicionales además de los previamente mencionados.

Pese a que la mayoría de bancos no cobran este impuesto, uno de los gastos extras es la comisión de apertura de la hipoteca que puede ser de hasta un 1% del dinero que la entidad financiera preste al comprador. No obstante, en el caso de que se cobre la comisión, esta puede estar incluida en la primera cuota de la hipoteca (cuota mensual + 500 euros de la comisión) o bien que se descuente del préstamo.

Otro de los gastos adicionales si se solicita un préstamo hipotecario es la tasación del inmueble para que el banco pueda conceder una financiación concreta, cuyo coste suele ir desde los 300 hasta los 600 euros. Esta cuantía suele abonarse cuando el banco concede el préstamo hipotecario, ya que se incluirá en este los gastos de tasar la vivienda.