La última despedida de Toni Kroos del Real Madrid en el Santiago Bernabéu

El Real Madrid cerró la celebración de la decimoquinta Liga de Campeones, lograda el sábado al vencer 0-2 al Borussia Dortmund en Wembley, en una fiesta en el estadio Santiago Bernabéu que sirvió también para despedir al alemán Toni Kroos como jugador del Real Madrid. El feudo madridista rozó el llenó para celebrar otra Champions. La rutina con las seis en las últimas diez temporadas.

Y lo hizo también para ver por última vez a Kroos como jugador del Real Madrid. Por ello, fue el principal protagonista de la celebración en el Santiago Bernabéu que culminó el día de festejos tras visitar la Catedral de la Almudena, la sede de la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Madrid y la fuente de Cibeles.

Tras repasar en vídeo, en las pantallas instaladas en el césped y en el videomarcador 360 grados, una a una las 15 Ligas de Campeones del Real Madrid, los futbolistas fueron saliendo uno a uno al terreno de juego. El primero, el italiano Carlo Ancelotti, con la quinta Champions como técnico en su palmarés, la tercera con el Real Madrid, encabezando al cuerpo técnico.

Cuando llegó el turno de los jugadores, el primero fue el argentino Nico Paz. El canterano no estuvo en la final de la Liga de Campeones, pero sí cuenta ya con una ‘Champions’ en su palmarés, de la que fue partícipe anotando en fase de grupos contra el Nápoles. El siguiente, un Kepa Arrizabalaga que, con una gran ovación, se despidió del conjunto blanco ya que su cesión procedente del Chelsea acaba el próximo 30 de junio.

Por orden descendente de dorsales fueron uno a uno desfilando por la pasarela hasta subirse al escenario central. Hasta llegar al 10, de Luka Modric, con Miki Nadal, maestro de la ceremonia, saltándoselo para dar paso a uno de los más ovacionados de la noche, Vinícius Junior, quien volvió a escuchar el cántico pidiendo el Balón de Oro.

Después, turno de Jude Bellingham, otro de los grandes protagonistas de la temporada del Real Madrid. En su primera temporada, 23 goles, 13 asistencias y una celebración icónica. Tras él, un recibimiento especial a los tres jugadores que han sufrido lesiones de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda esta temporada: David Alaba, Éder Militao y Thibaut Courtois.

Tras ellos, turno del autor del 0-1 en Wembley. El futbolista que puso la primera piedra de la Ciudad Real Madrid. Un Dani Carvajal que sumó su sexta Liga de Campeones, todas ellas como titular.

De leyenda en leyenda. Ahora sí, sonó el 10 en el Bernabéu. Un dorsal que seguirá portando Luka Modric la próxima temporada, tras confirmar Florentino Pérez su continuidad en la zona mixta de Wembley.

Y tras Modric, su compañero de batallas, Toni Kroos, quien recibió la gran ovación de la noche en su despedida del Santiago Bernabéu.

El último en salir al escenario fue Nacho, con la decimoquinta Liga de Campeones en sus manos, como durante toda la jornada de celebraciones y con la afición cantando al unísono “Nacho, quédate”, que se repitieron cuando cogió el micrófono.

«Muchas gracias, Bernabéu. Ha sido una temporada espectacular. El presidente ha formado un lío con este estadio que es increíble. Estoy muy orgulloso de todo el equipo y de la afición. Trabajamos por noches como la de ayer. Tenemos 15 Copas de Europa, somos los reyes de Europa, del mundo, del universo… increíble. Es un orgullo ser capitán de esta plantilla y ojalá sigamos haciendo historia», dijo Nacho sin hacer mención a su futuro.

Quien sí lo hizo fue Luka Modric. «Qué alegría estar aquí otra vez después de dos años. Muchas gracias por vuestro apoyo. Esta Copa es también vuestra y hasta la temporada que viene. ¡Hala Madrid!», declaró.

Tras él, turno de Kroos en su adiós al Santiago Bernabéu, quien volvió a escuchar la petición de su afición para quedarse una temporada más, pero su decisión es firme. «Gracias por la última semana. Por la despedida inolvidable en este estadio. Quiero decir gracias por diez años aquí, inolvidables, desde el primer día hasta hoy. Me habéis ayudado mucho y no puedo decir mucho más que gracias. Hala Madrid y os quiero», expresó.

El último en coger el micrófono fue un Ancelotti que quiso destacar la importancia del Santiago Bernabéu en los éxitos de su equipo.

«Ganar nos da a todos mucha felicidad, pero la felicidad más grande es la manera de compartirlo entre nosotros. Pasar noches como esta nos da mucha alegría. Seguiremos todos juntos luchando , compitiendo, ganando, soñando… con vosotros y para vosotros. Este estadio, el mejor del mundo, es capaz de generar una energía que nos ha permitido y nos va a permitir no rendirnos nunca y hacer cosas que pueden ser impensables. Todo el mundo sabe que 90 minutos en el Bernabéu son molto longo», ponderó.

Cumplidos con los discursos, llegó el turno de los cánticos, el manteo a Toni Kroos y la vuelta de honor al Santiago Bernabéu para cerrar una jornada de celebraciones que arrancó seis horas antes en el estadio madridista.