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Polémica

El hijo de Negreira admitió a Hacienda que es socio del Barça desde los 15 años

El hijo del ex número dos de los árbitros tiene un sinfín de vinculaciones al Barça

El Camp Nou, estadio del FC Barcelona. FCBFCB

El 'caso Negreira' avanza. 'El Confidencial' informa de que Javier Enríquez Romero, hijo del ex número dos de los árbitros José María Enríquez Negreira, afirmó a la Agencia Tributaria que es socio del FC Barcelona desde los 15 años de edad, tal y como informa 'El Confidencial'.

Además, también trabajó con futbolistas del club culé como coach durante bastante años en los que cobró grandes cantidades de dinero. También forma parte de la Agrupación de Veteranos del conjunto azulgrana, que entrena dos veces a la semana y disputa encuentros con otros integrantes de la asociación. De hecho, existen movimientos frecuentes de una de sus cuentas del banco CaixaBank en las que se reflejan cargos recurrentes del Barcelona con el concepto "abonament".

Una de las empresas de Enríquez Romero, Soccercam SL, presentó a la Agencia Tributaria gastos relacionados con ese y otros servicios similares por un importe cercano a los 100.000 euros. El asunto es que Hacienda cuestionó gran parte de los gastos presentados por Soccercam SL, entre ellos, varios importes relacionados con la compra y mantenimiento de un vehículo. Enríquez Romero alegó que tenía derecho a deducirse esas partidas porque se trataba de costes "necesarios y afectos a la actividad de la sociedad". "Concretamente", explicó el hijo de Negreira, "dicho vehículo sirve para acompañar a un equipo arbitral".

El artículo 286 bis del Código Penal que regula el delito de corrupción en los negocios (vigente desde 2010) castiga con penas de prisión de seis meses a cuatro años, y de inhabilitación de uno a seis años, a los "directivos, administradores, empleados o colaboradores de una entidad deportiva", así como a los deportistas y árbitros que reciban, soliciten o acepten "un beneficio o ventaja no justificados" o la mera promesa de obtenerlo "como contraprestación para favorecer indebidamente a otro".

Hasta la fecha, el propio Negreira ya explicó ante la Fiscalía cómo era su relación con el club culé. "Nunca he querido cobrar porque yo ya tenía mi empresa y cobraba del Fútbol Club Barcelona. Nos reuníamos en Madrid cada semana o cada 15 días. Lo que hacíamos era revisar los informes que hacen los árbitros después de cada partido (se refiere al acta) y puntuarlos. También teníamos un informador de la federación que revisaba si el arbitraje había sido correcto. Preparar charlas técnicas a los árbitros. Reunirnos con los presidentes regionales". "Ir a ver los partidos personalmente o a través de compañeros exarbitros y estar informado del porqué se habían tomado decisiones. El Fútbol Club Barcelona consideraba que se perjudicaba al equipo y se favorecía a otros equipos. Esto es una hipótesis personal, nadie me lo ha dicho directamente. Mi obligación era dar mi opinión sobre los partidos en cuanto al arbitraje y a los jugadores. Asesoramiento técnico. Lo que el Fútbol Club Barcelona quería era asegurarse que no se tomaban decisiones en su contra, que todo fuera neutral", afirmó.