Vinicius responde con un partidazo a las provocaciones de la afición del City

Cuanto menos ruido hace mejor juega Vinicius y se pudo comprobar en el Etihad. El brasileño fue el delantero más inspirado de los cuatro que puso Ancelotti ante el City y volvió a demostrar también que cuando a todos se les acaba la fe, él sigue teniendo de sobra para ir a hacer una carrera más. La que dio en el minuto 92, cuando solo quedaba uno por delante y parecía que a todos les venía bien el empate. Pero no a Vinicius, que metió la punta de la bota para prolongarse el balón hacia adelante y después levantarlo por encima de Ederson. De lo que parecía nada, Vini había creado la jugada del 2-3. Suyo fue también el remate que pegó en el pecho del portero y terminó en el gol de Brahim, pero lo del brasileño había empezado mucho antes, en una primera parte en la que desbordó cada vez que quiso. Un fuera de juego milimétrico le privó de un penalti que había provocado muy hábilmente, y después, tras una de sus muchas llegadas hasta la línea de fondo, le puso la pelota a Bellingham en la cabeza que remató fuera.

Vinicius supo estar centrado en el trabajo, y eso que la grada del Etihad quiso provocarlo. Primero con la pancarta en un fondo con Rodri besando el Balón de Oro, y después con los cánticos en los que le preguntaban que dónde estaba su pelota dorada. En un momento, él lo escuchó y se llevó el dedo índice a la camiseta donde está el parche con las 15 Copas de Europa del Madrid.

No marcó Vinicius, pero es que no lo necesitó para ser decisivo, fue un martillo que golpeaba al City cada poco tiempo, protagonista de muchas de las 20 llegadas de los blancos en Mánchester. Un partido completísimo que dejó contento a Ancelotti.

«Estoy tranquilo. La primera parte de la eliminatoria la hemos hecho bien, hemos sacado una buena ventaja, pero la eliminatoria no se ha acabado. Ha sido un partido muy completo por nuestra parte en todos los aspectos. Hemos defendido bien, con un bloque compacto, y hemos sido efectivos delante, con muchísimas ocasiones, analizaba el técnico del Real Madrid. «No hemos bajado los brazos con la desventaja y la victoria es merecida. Han tomado ventaja con el penalti, pero hemos sido muy peligrosos arriba. Los cuatro de ataque podían tener más acierto, pero han generado muchas ocasiones con su movilidad y calidad. No le pongo un pero a este partido», continuaba Ancelotti, feliz de que sus cuatro delanteros fueran capaces de ayudar en defensa y de ser muy activos ante la portería rival. Obligaron a Ederson a hacer cinco paradas y se estrellaron dos veces con los palos.

Mucha creación ofensiva con un Vinicius contestando con fútbol a la provocación «citizen».