Polémica

Rubiales se revuelve contra su amigo Pedro Sánchez: "Usaron a Jenni para tapar la amnistía"

El ex presidente de la RFEF también carga con dureza contra las futbolistas y desvela los políticos que le mostraron su apoyo. "Las jugadoras Mienten. Sí me pidieron la cabeza de Jorge Vilda" sentencia.

Pedro Sánchez y Luis Rubiales
Pedro Sánchez y Luis Rubialeslarazon

Luis Rubiales no aguanta más. Tras las sanciones de La FIFA y el Consejo Superior de Deportes y la graves acusaciones que llegan desde Inglaterra, el ex presidente de la RFEF ha acabado estallando contra todo y contra todos. Linchamiento político por parte de los "radicales", sanción desproporcionada, silencio por miedo y una sorprendente comparación con el 155 en Cataluña han sido algunos de sus principales armas de defensa como demostró en el documento enviado al Tribunal Administrativo del Deporte.

Moncloa trató de medir cada paso en las actuaciones para apartar de su cargo a Rubiales con el objetivo de evitar una “venganza” del cuestionado presidente de la Federación. No en vano, su padre había ocupado diversos cargos en el PSOE, se había publicado que el granadino tenía grabaciones de importantes miembros del Gobierno e incluso que el Ejecutivo de Pedro Sánchez había mirado para otro lado en los numerosos escándalos que salpicaron el mandato de Rubiales. 

Finalmente no tuvieron más remedio que dejarlo caer y ahora el ex presidente de la RFEF se revela contra su amigo Pedro Sánchez. El expresidente de la RFEF ha hablado para el canal de Youtube de Alvise Pérez acerca de la polémica que lo ha apartado de la presidencia del ente federativo y acusa a los políticos de querer tapar con su caso asuntos mucho más graves.

Un escándalo para tapar sus pactos

"Mi caso, durante dos o tres meses, es altamente explicable para justificar que se hablara poco de otras cosas más importantes como los pactos del PSE con Junts y ERC", aduce. Y añade que "la amnistía es una vez en la separación de poderes: Lo lamentamos prácticamente todos los españoles, muchos votantes de izquierdas no lo entienden".

Insiste en que lo suyo ha sido un claro ejemplo de demagogia política y un linchamiento inaceptable. ."La demagogia ha ganado la partida, por ejemplo en el tema de la igualdad. ¿Tenemos que trabajar para que más mujeres accedan a puestos? Sí, pero no había ninguna vicepresidenta de la RFEF hasta que yo llegué. ¿Tenemos que trabajar para que aquellos que maltratan sean condenados? Sí, pero también para que las denuncias falsas no vuelvan a ocurrir. La igualdad no es que la voz de una mujer valga más que la de un hombre, ni al revés. En España no hay igualdad ni tampoco justicia".

El ex presidente de la RFEF tampoco se ha cortado a la hora de explicar la actitud de las jugadoras. "Mienten. Sí me pidieron la cabeza de Jorge Vilda . Como no se la di, vieron la oportunidad de montar este teatro y se vengaron".

Un teatralización exagerada que ya se encardó de denunciar en su recurso ante el CSD. Abunda en sus alegaciones que tuvo el consentimiento de Hermoso y lamentó los cambios de versiones cuando hay delitos de por medio que se quieren exonerar o "cuando no los hay, pero se pretende teatralizar y llevar la presión al máximo extremo para señalar y criminalizar". "En mi caso, muchos han cambiado de la opinión privada a la pública (otros callan, que es más seguro). También están los que han modificado su versión, ellos sabrán porqué. Algunos han querido utilizarme espuriamente para criminalizar un acto de alegría y celebración, mutuo y consentido. Sencilla y llanamente, yo pregunté y ella me dijo 'Vale'. Punto y final. Ustedes no pueden demostrar lo contrario. Ni ustedes ni nadie porque lo que digo es la verdad", sentenció.

Los políticos que le apoyaron

El expresidente de la RFEF también detalló los apoyos que recibió justo después de que diera el beso no consentido a Hermoso y la polémica empezara a formarse. Según Rubiales, en el avión de regreso desde Australia había algunos políticos que le mostraron apoyo. Por ejemplo, Borja Sémper del PP, como también el secretario de Estado por el Deporte, Víctor Francos, quitaban hierro al polémico pico.

Unos apoyos a los que también se refirió durante su polémica entrevista con Piers Morgan en la que llegó a filtrar un mensaje de Whatsapp que colocaba en la picota a la actual seleccionadora Montse Tomé. “Quiero leer un mensaje. Tres días después, me dijo: ‘Solo puedo estar inmensamente agradecido por el momento que hemos vivido, y eso es también gracias a ti. Quiero mandarte mi apoyo. Que no se empañe lo que has hecho’. Después, esta persona, junto con 10 más, firma una carta en la que dice que mi acto fue machista”, hizo público.

El pasado miércoles, la FIFA confirmaba su sentencia de tres años de inhabilitación y explicaba que los motivos de su sanción podrían resumirse en tres: beso a Jenni, levantamiento a Athenea y tocamiento de genitales en el palco. Un durísimo informe en el que se tacha la actitud del expresidente de RFEF de "agresiva, impropia y misógina". Rubiales asegura que seguirá defendiendo su inocencia donde sea necesario.