Revolución en la portería

¿Se imaginan un Real Madrid sin Iker Casillas y Diego López la próxima temporada? La respuesta puede ser afirmativa porque ésa es la idea que se baraja en el club. La próxima incorporación de Keylor Navas –se pagarán al Levante los diez millones de la cláusula de indemnización– puede ser el principio de la revolución en la portería madridista. Con el costarricense atado, aunque, de momento, el club no lo hará oficial, se busca una salida para Diego López, con contrato en vigor hasta 2017, sin ninguna oferta en concreto encima de la mesa, por mucho que se hable del interés del Nápoles de Rafa Benítez. Nadie se ha puesto en contacto con el jugador gallego ni con su representante, por lo que Diego insiste en que su futuro está en el Madrid, dispuesto a «competir por el puesto». Un puesto en el que a lo mejor tampoco está Casillas. Y es que, como anunció en primicia Javier Alba, compañero de Antena 3, el pasado 1 de julio, en el Real Madrid se sigue barajando la posibilidad de que los dos porteros de la pasada temporada abandonen la entidad.

La salida de Casillas conllevaría la llegada de Kiko Casilla, portero del Espanyol, que el Real Madrid puede recomprar por cinco millones de euros. Casilla es un jugador que ya estuvo en el club y que en las últimas temporadas ha progresado mucho, suscitando el interés de los equipos punteros. El meta tarraconense ha insistido en los últimos días en que su deseo es renovar por el Espanyol y jugar varios años de blanquiazul. Sin embargo, si desde el Bernabéu efectúan la opción de la recompra no tendrá más remedio que acatar los deseos del Madrid.

¿Cómo saldría Iker del Real Madrid? Por la puerta grande, con todos los honores que se merece un jugador que lo ha dado todo por el club, que ha conseguido ser el mejor del mundo en su puesto defendiendo la portería madridista y que es algo más que un símbolo para los aficionados, por mucho que la última temporada con Ancelotti haya sido una especie de suplicio para él, aunque fue titular en la final de Copa y en la de la Liga de Campeones. Tanto, que a lo largo de los últimos meses su intención era la de marcharse. Una conversación con Florentino Pérez sirvió para retomar la situación y todo apuntaba a la continuidad de Iker, cosa que ahora no puede afirmarse con certeza. Sus actuaciones en el Mundial y en la final de la «Champions», producto de la inactividad, quizá hayan devaluado su caché a nivel internacional, pero Iker sigue siendo muy apetecible para equipos como el Arsenal o el United.

Puede darse el caso de que el Real Madrid no encuentre salida para Diego López y que Iker no se vaya, por lo que tendrían que convivir los tres guardametas, a no ser que Navas fuera cedido. Lo que es evidente es que una situación como la de la pasada temporada en la que la portería se convirtió en centro de polémica cada partido no se va a repetir.

Ancelotti es consciente de ello, sabe lo que piensan en el club y actuará en consecuencia. De momento, Diego López lleva una semana más de trabajo que Iker, que se incorporará el próximo lunes, día en el que el equipo inicia su gira. El primer partido oficial es el 12 de agosto en Cardiff contra el Sevilla. Para entonces, la portería podría tener ya dueño.