Se subasta la tabla más antigua que recoge los Diez Mandamientos

La casa de subastas Sotheby's ha puesto en venta un interesante lote. Se trata de la placa inscrita más antigua que se conserva de los Diez Mandamientos, una tabla paleohebrea de unos 1.500 años. Incisa durante la era romano-bizantina tardía, asegura dicha casa que "es el único ejemplo completo de una tabla de los Diez Mandamientos de este período".

Se trata de una tablilla de mármol blanco, con unas medidas de 632x562x62 mm. Se observa en ella inscritos de forma cuidadosa y con cincel los Diez Mandamientos en su versión samaritana israelitas. Veinte líneas, cada una de ellas con entre once y quince caracteres, y con palabras separadas con uno o dos puntos. 

Los Diez Mandamientos son uno de los textos más conocidos e influyentes de la palabra escrita del mundo, tanto en el sector religioso como en el de la filosofía, la literatura, la pedagogía, el derecho o la ética. Descritos en sus primeras grabaciones como pronunciados por Dios a Moisés, siguen siendo hoy fundamentales para los seguidores del judaísmo y el cristianismo. "Pero la influencia del Decálogo se extiende mucho más allá", afirman desde Sotheby's, "sustenta en todo el mundo los conceptos fundamentales del derecho consuetudinario, el derecho natural, los códigos legales formales, la conducta personal y el pacto social".

En cuanto a la tablilla que se encuentra en subasta desde este miércoles, explica la casa que "se llama Tabla de Yavne, en honor a la ciudad en la llanura costera de Israel, cerca de donde fue redescubierta hace más de un siglo". Este mármol fue hallado por casualidad durante una serie de excavaciones para una vía férrea que comunicaría dicha tierra con Egipto. Su descubridor, el padre del prestigioso arqueólogo Jacob Kaplan, trasladó la tablilla a su casa y la colocó en el umbral de una de sus habitaciones. 

Con esto, la tabla, aseguran desde Sotheby's, "no es solo la más completa y antigua que se conserva con inscripciones de los Diez Mandamientos, sino que el texto que conserva representa el espíritu, la precisión y la concisión del Decálogo en lo que se cree que es su formulación más antigua y original.

Traducido del hebreo, la inscripción línea por línea dice lo siguiente: "Dedicado en el nombre de Koraj te llamaré para recordarte por el bien para siempre. Dios habló todas estas palabras diciendo Yo soy el Señor tu Dios no tendrás para ti otros dioses además de mí; no te harás para ti una imagen esculpida ni ninguna semejanza; porque yo soy el Señor tu Dios soy un Dios apasionado: acuérdate del día de reposo santificarlo; honra a tu padre y a tu madre; no matarás; no cometerás adulterio; no robarás; no darás (falso testimonio) contra tu prójimo; no codiciarás; erigirás estas piedras que te estoy ordenando hoy; en el monte Gerizim te levantarás a Dios".

Se estima que la tablilla llegue a venderse, al menos, por entre un millón y dos millones de dólares.