El hijo de Eugenio (y doce más) triunfan en el Carnaval de Cádiz: «Era mi padre, picha»

Se sube el telón del Gran Teatro Falla de Cádiz y se insinúa una chirigota entre la penumbra. La voz de un componente dice alto y claro: «Saben aquel que diu que era un tío que contaba chistes con la alegría que le caracterizaba, una sonrisa de oreja a oreja y doble sentido. Y molt, molt ingenio: ¡era un genio!». Se ilumina el escenario, y en el centro de la chirigota «Comparsa los calaíta (fuimos a por tabaco). Una chirigota de toda la vida» –vulgo Los Eugenios–, sentado en la banqueta que habitualmente ocupa el autor y director de la misma Alejandro Pérez «Peluca», está Gerard Jofre, el hijo mayor del mítico humorista Eugenio, que remata su introducción con un «¡Po’ pisha, era mi padre!». Se levanta del taburete, abre los brazos abrazando simbólicamente al respetable del Teatro, a la vez que, impresionado por la buena acogida, exclama: «¡Qué fuerte!». Espera Gerard Jofre a que entre en escena el creador de esta chirigota, Ale «Peluca», se abrazan, y el catalán le cuelga al gaditano del cuello la característica cruz que llevaba su padre a modo de colgante.

Esta peculiar y emocionante escena se produjo la noche del pasado lunes durante la celebración de la segunda semifinal –son cuatro– del Concurso Oficial de Agrupaciones de Carnaval (COAC) en el Falla. Así, con este detalle al comienzo de su presentación y un repertorio de mucho nivel, la chirigota «Los calaíta» presentó sus credenciales para estar en la gran final del certamen de coplas el próximo viernes, 28 de febrero, día de Andalucía.

Y es que «Los Eugenios», como ya es conocida oficiosamente la chirigota por los aficionados, es una agrupación de jóvenes veinteañeros hasta entonces prácticamente desconocida, que ha sido, sin duda y como se dice en argot carnavalero, un pelotazo. O sea, la mayor y más grata sorpresa del COAC 2025. La lograda caracterización e interpretación de un personaje como Eugenio –dice su hijo que «Hacer de Eugenio es muy difícil, pero hacer doce Eugenios es una brutalidad»–, tan querido a la vez que olvidado, sumado a la frescura de las letras del grupo, cargadas de humor surrealista, crítica mordaz, doble sentido y transgresión son factores que hacen que una chirigota que, a priori, no se esperaba que pasase de primera fase, sea para muchos la gran favorita a imponerse en su modalidad en el concurso.

Cuenta Gerard Jofre, que también es cómico como su padre, que supo de este grupo y del homenaje tan conseguido que hacían a su progenitor a través de un amigo que se lo hizo llegar a través de Instagram. Asegura el artista barcelonés, que guarda un gran parecido físico con Eugenio, que se le pusieron los pelos de punta y se emocionó escuchando a «Los calaíta», de ahí que no se pensará en contactar con su director y artífice, Ale «Peluca», para felicitarle y darle las gracias. La relación digital desembocó en la promesa de encontrase el pasado fin de semana en Cádiz. Y así fue: Jofre se presentó en la Tacita de Plata para conocer a estos chirigoteros y, de camino, hacer un cameo en el Gran Teatro Falla con ellos: «Mi padre era una amante de las chirigotas. Las veíamos juntos», confesó.

Aunque su autor no lo haya confesado en público, probablemente esta chirigota provenga de la recuperación de la figura del humorista catalán que se ha producido gracias a la notable película «Sabel aquell» (2023), dirigida por David Trueba y protagonizada por David Verdaguer, y cuyo guión está basada en la biografía «Eugenio» (Libros Cúpula), publicada en 2018, y escrita por el propio Gerad Jofre. «Los calaítas» no son los únicos chirigoteros que este carnaval rendirán tributo a Eugenio, ya que se ha sabido que, paralelamente, una chirigota jiennense ha tenido la misma idea.